Restaurante referente en carne y churrasco hace años, el cambio de dueños no le ha venido bien. El producto bueno, pero excesivamente caro para la atención y servicio que dan. Hemos tomado vino y agua y no nos han puesto dos copas, algo bástante basico en restauración. Pedimosl chuletón de 1,5 que a nuestro entender no alcanzaba ese peso y cuando se lo dijimos al camarero, nos dice el desafortado e inapropiado comentario que si tomamos otra copa de vino no se nota. Solo plato principal, sin entrantes ni postres a más de 30 euros por cabeza. No repetiremos.