Restaurante: Aguirre

Acabo de llamar para reservar una comida para 15 personas y jamas me han tratado peor. Le he pedido espacio para 3 carritos de bebes y su contestación ha sido que si ponemos los carros en vez de entrar 20 entramos 15 y esta perdiendo. Y tras decir eso me ha colgado. No me ha dado tiempo ha contestarle y ha decirle que ojala y nunca tenga que lamentar el haber dicho ha nadie lo que a mi me ha dicho.

Lo peor que he visto. Langostinos casi crudos, pescado congelado y casi crudo, creen que por echar un poco de tomate se disimula, mis hijos cocinan mejor. A cualquier petición de hacerlo mas, solo obtuvimos malar caras y ningún resultado. Mala malísima calidad, servicio nulo. 16 euros por un pescado sin cocinar es un exceso, para eso me voy al super a la sección de congelados. No pude pagar con tarjeta. Ese día llevaba deportivas y me pegaba con la suciedad del baño, jamas, jamas he estado en un sitio similar. Es un asco. Lo mínimo que puedes pedir en un restaurante es que sepan cocinar un pescado.

Si lo que deseas es comer mal y salir cabreado, es el restaurante ideal. Cutre, malas materias primas, pescados congelados mal elaborados, carnes de 3ª categoría y encima nada barato. Un menú del día escaso y mal elaborado sale por 18 euros. Del vino y los postres mejor no hablar. Botellas salidas del congelador para disimular la mala calidad del vino y los postres ya quisieran parecerse a los industriales que tanto abunda, en fin no sé como todavía está abierto ese antro culinario. Estoy hablando del día 10-9-2011, por cierto fiestas en bermeo.

El restaurante es una m.... De cocina tradicional vasca, nada de nada. Aún estando en una localidad portuaria, es pescado es congelado y las raciones escasas, el vino te lo llevan en una botella abierta (será de relleno), el servicio malo y muy lento, con escaso personal (extranjero), que es el que paga el cabreo del cliente. Se come mejor de bocata frío. Vamos que compras pescado fresco en cualquier ciudad del interior, y allí te comes una m..

Nuestra experiencia en este restaurante es pésima. El menú caro, escaso (nos quedamos con hambre) y malo. La sala comedor es deprimente, cerrada sin una sola ventana y muy claustrofóbica. El comedor se llenaba de humo de la cocina constantemente. El servicio malo. Y no vimos rastro de la cocina tradicional vasca ni ningún tipo de carta de vinos. Un restaurante para olvidar.