A pesar de que comimos menú del mediodía suponiendo que sera rápido, estuvimos casi dos horas en el restaurante. Los escalopines de ternera no se pudieron ni cortar, ni masticar, la tarta de chocolate quemada. El servicio pésimo (a la chica de la mesa de al lado le trajeron dos veces un plato equivocado). Y aunque anuncian que una copa de vino o agua entra en el menú de los 11,90 euros, el agua con gas te la cobran... A 3,20 euros. Nunca mas.