Vamos periodicamente desde Pamplona, atraídos por el lechazo. Memorable. Y no olvidar la tarte de hojaldre. Hemos estado antes de fin de año, y nos avisan del cambio de titularidad. Solo deseo que el asador continúe como está, y con los platos actuales, para poder dar una vuelta de vez en cuando con la seguridad de comer bien, sencilla y cojonudamente.