Es el mejor restaurante de sevilla. He ido varias veces y siempre me sorprende. Una comida magnífica y elaborada.
Es el mejor restaurante de sevilla. He ido varias veces y siempre me sorprende. Una comida magnífica y elaborada.
Nos sorprendió bastante, la verdad fuimos sin idea preconcebida y creo que eso es lo mejor. La entrada y el recibimiento muy correcto. Decoración curiosa y platos ricos y elaborados. Muy buena la atención al público. Felicitamos al chef!
Aunque vamos a menudo a Sevilla nunca habíamos comido en az zait. La verdad es que nos ha encantado en todos los sentidos: espacio (muy acogedor e interesante), servicio profesional y agradable, detalles y, sobre todo, la calidad, cantidad y presentación de la comida. Menú de degustación perfecto en calidad y cantidad. La relación calidad-precio buena. Muy recomendable.
Nos pareció una experiencia maravillosa. Antonio el gerente estuvo en todo y no faltó de nada. Volveremos.
Recomendaría este restaurante a cualquiera, tanto pos su forma como por su contenido, la cómoda ha sido genial y la atención fabulosa. Resumiendo el sitio es espléndido, si acudieráis no os arrepentiréis.
Un sitio muy agradable y acogedor, nos atendieron estupendamente y todo lo que comimos (un menú degustación) estaba delicioso. Resulta más bien caro, es sólo para ocasiones especiales en las que no te importe hacer un extra. Mejor no ir en coche, es imposible aparcar por los alrededores.
Fue una auténtica degustación de placeres en el paladar. Tomamos el menú degustación de ocho platos, el cual fue demasiado para cenar, de hecho tuvimos que perdonar los quesos. A mi especialmente me gustó muchísimo el "helado de cerveza, acompañado de una ensalada de alubias blancas, el "ajoblatonicnco con reducción de vino de rioja" y los "langostinos con fideos y huevo escalfado". El trato todo el personal exquisito, y de postre un gintonic de "martin miller". Una velada digna de nuestro 20º aniversario de bodas.
Fuimos a comer en pareja para celebrar un día especial y la elección del restaurante az-zait fue todo un acierto. Escogimos la opción del menú degustación de 8 platos, que incluía al final el famoso carrito de quesos, buenísimo. La comida es excepcional y el servicio excelente. La carta de vinos es completa y sugerimos que si no sois muy entendidos de vinos os dejéis aconsejar por los camareros, que tienen un trato amable y exquisito. De la comida nos gustó todo pero destacamos: el salmorejo con centollo, la gelatina de gyntonic y la taleguilla de queso y gambas. Sin duda lo aconsejamos para pegarse un buen capricho en un día muy especial. Un último consejo: en días de calor empieza con una copa de cava y aceitunas, te entona para empezar a comer.
Recomendable por completo y más si os gustan los quesos. Los vinos están bien de precio y el menú degustación esta espectacular. El menú degustación consta de 8 platos por 42 euros por persona, no está mal para la cantidad y calidad. Al final del menú ofrecen un carro con quesos y es aconsejable dejar un hueco para ellos.
Yo he comido en el az-zait dos veces, y las dos fueron ocasiones inolvidables, por el servicio de alta calidad que ofrecen y su cocina tan espectacular. La diferencia se encuentra en los pequeños detalles, que hacen que un sitio pase de bueno a excelente, y este es el caso del este restaurante. Y esa calidad se paga para poder mantenerla. Te pueden invitar a un chupito de orujo, pero entonces no estarías comiendo en el az-zait. Para este restaurante, hasta el más mínimo detalle es importante. El carrito de pan ofrece una variedad increíble (y eso hay que saber apreciarlo), el carrito de quesos estoy segura que requiere de una gran inversión, por no hablar de la bodega y de su original carta. En resumen, no creo que sea excesivo lo que cobran en este restaurante con todo lo que ofrecen a cambio, más caro me parece cualquier restaurante fast food. Al final con estas cosas lo que pasa es que los pocos sitios que se salen un poco de lo corriente para sobrevivir se ven obligados a adaptarse, y finalmente terminan por convertirse en una más del montón. Animo desde aquí a este restaurante para que no cambie y siga ofreciendo esa maravillosa experiencia
El pasado viernes fui a cenar con mi marido a celebrar nuestro aniversario. Como podéis imaginar buscábamos un sitio "inolvidable" y así va a serlo. Pero no precisamente por los gratos recuerdos. La comida bien, el servicio aceptable. Muy mal que no haya sitio para fumadores y se cuele el humo en tu cena.
Elegimos menú degustación. Hasta ahí todo normal pero... Sorpresa cuando llegó la cuenta. Nos habían cobrado el cubierto (en todos sitios te los prestan para comer gratis, aconsejo llevarlos de casa) el agua, la pieza extra de pan, y la copa de cortesía que tan amablemente te ofrecen al finalizar la cena. Me parecen detalles de lo más ridículos máxime cuando te estás dejando allí un dinerito curioso. Y ya no es el dinero en sí de estos detalles que te cobran, si no la sensación de peseteros que transmiten. Definitivamente mal y "poco inteligente" la política de az-zait. Os confieso que no pienso volver y no os lo recomiendo sino queréis sentiros como yo, decepcionada
Yo he comido en el az-zait dos veces, y las dos fueron ocasiones inolvidables, por el servicio de alta calidad que ofrecen y su cocina tan espectacular. La diferencia se encuentra en los pequeños detalles, que hacen que un sitio pase de bueno a excelente, y este es el caso del az-zait. Y esa calidad se paga para poder mantenerla. Te pueden invitar a un chupito de orujo, pero entonces no estarías comiendo en el az-zait. Para este restaurante, hasta el más mínimo detalle es importante. El carrito de pan ofrece una variedad increíble (y eso hay que saber apreciarlo), el carrito de quesos estoy segura que requiere de una gran inversión, por no hablar de la bodega y de su original carta. En resumen, no creo que sea excesivo lo que cobran con todo lo que ofrecen a cambio, más caro me parece cualquier restaurante fast food. Al final con estas cosas lo que pasa es que los pocos sitios que se salen un poco de lo corriente, para sobrevivir se ven obligados a adaptarse y finalmente terminan por convertirse en una más del montón. Animo desde aquí a este restaurante para que no cambie y siga ofreciendo esa maravillosa experiencia.
Carta bastante pobre, pero la comida está muy bien aunque algo escasa para el precio que tiene
Tuvimos la ocasión mi mujer y yo de ir a comer a este restaurante, recomendado por una de mis hijas y aunque en principio soy, por lo menos yo, bastante reacio a la "nueva cocina" y a la "cocina de diseño", nos llevamos una muy grata impresión, porque el ambiente es exquisito, la presentación impecable, el servicio genial y la comida estupenda. Desgraciadamente, no pude apreciar los productos de la bodega, que debe ser buena y bien surtida, pero mi médico me lo tiene prohibido. En cuanto al "carrito de los quesos" que ya nos habían hablado de él, una vez terminados los platos principales no fuimos capaces, con todo el dolor de nuestros corazones, de probarlos, pero nos propusimos volver en otra ocasión a degustarlos.
Comparto totalmente la opinión anterior, y añado que probamos, en compañía de mi mujer, de mi hijo y su mujer y de mis consuegros los productos de la bodega y del "carrito de quesos", y quedamos prendados. Para mi mujer, hoy por hoy, es el mejor de sevilla. Precioso ambiente, fenomenal presentación y gran servicio, que hacían mas agradable la deliciosa comida. Espero volver pronto.