Restaurante: Bar María

No vuelvo, embutidos como salchichón, queso en lonchas de envase y finísimo la ensalada llena de vinagre, salchichas secas y pasadas, el pan de ayer, tortilla precongelada y de las pechugas de pollo ni hablar un olor.... Lo siento pero eso es lo que me han servido por 15 euros el menú

No nos ha gustado nada. Han tardado muchísimo en atendernos. La comida era congelada y el servicio bastante antipático. Una gran decepción.

Aconsejados sobre sella y dicho restaurante, hemos acudido este puente de noviembre, que estábamos en Alicante ciudad. Paraje muy bello, silencioso, serrano... Nos atiende una mujer, de forma muy atenta y familiar. Comemos en la terraza a las tres, solecito muy agradable. Raciones de champiñones y sepia. Deliciosas. Paella para cinco. En su punto, muy rica y sabrosa. Postre, flan de almendras casero. Antologico. Es una bonita excursión y comer en este restaurante, el colofón. Lo recomiendo.

Voy de vez en cuando al restaurante Bar MarÍa. Y he de deciros que, hasta llegar allí, recorro unos 40 kilÓmetros, 10 de ellos adentrándome hacia la montaña y lo hago con mucho gusto. No es un restaurante con una amplia variedad de platos que ofertar. De hecho no tienen carta (o por lo menos a mÍ nunca me la han enseñado). Es el tÍpico bar de pueblo y todo es casero. Yo os recomiendo que pidáis un arroz, acompañándolo de entrada con algún plato de "sangre", "champiñón", "habas", una ensalada... Y por supuesto pedid el vino de la casa. Es un vino distinto al que se comercializa en las tiendas. De postre, el flan de turrón (casero por supuesto) está delicioso. El precio, bien.

Mucha experiencia en carnes y embutidos.
Las paellas, demasiado aceite, pero no cambian.