Restaurante: Can Forne

Es la segunda vez que vamos a este restaurante. La primera fuimos con unos amigos en verano y comimos al menú que estaba bastante bien y el servicio rápido. En cambio esta vez hemos ido en domingo a la carta y la verdad no es nada del otro mundo nada más sentarte te traen un plato de aceitunas y una tortilla de patatas de cortesía. En otras mesas les llevaban anchoas y en otras embutido que al final de cortesía no tiene nada ya que cuando repasas la cuenta te lo cobran. Ya que lo cobran como mínimo podrían tener la delicadeza de preguntar que queremos de entrante o bien si nos apetece. Yo trabajo en un restaurante de menú diario y el entrante siempre preguntamos al cliente que le apetece de lo que tenemos cada día. El restaurante estaba lleno y como hay poco personal los dos primeros platos fueron bastante rápidos pero el postre y el café tardaron casi media hora en servirnos y a la hora de la cuenta al final nos tuvimos que levantar a pagar a la barra.

Llevo años siendo cliente de can forner, también conocido por can manel. Nunca me ha defraudado. Excelente brasería, con toque catalán; precio muy razonable. Cualquier cosa que te sirvan está muy buena; destacaría la tortilla de patatas y la espalda de cordero al horno (el sitio que conozco donde mejor la hacen, con diferencia). El trato, muy agradable. El único inconveniente es que la sala de dentro (hay dos salas) es un poco estrecha y si se acumulan, por ejemplo, grupos de adolescentes de esos que se hablan a gritos de una punta a otra de la mesa resuena un poco. Mejor la sala de fuera. De todas formas, he recomendado muchas veces este restaurante a amigos y siempre me lo han agradecido después de visitarlo. Por algo será. Cenas por unos veinte euros, o menos. También tienen un menú al mediodía, los días laborables, pero este no lo he probado nunca.

Estuve el domingo, que subimos unos amigos con los quads, y la verdad que está muy bien. Recomiendo los pies de cerdo a la brasa están buenísimos, y te atienden muy bien. Los camareros son muy cachondos jeje, ya he ido 3 veces y volveré.

Me lo recomendó un amigo de palau de plegamans hace unos diez años, y desde entonces suelo ir un par de veces por año, para degustar sus deliciosas alcachofas y sus exquisitos pies de cerdo a la brasa entre otras cosas. El personal muy amable, atento y rápido, y el precio más que correcto. Lo he recomendado a gente que le gusta quedar bien saciado.

Hem buscat bolets i teniam gana, pas-savam pel deban de Collsuspina, hem parat i hem buscat un restaurant per dinar , hem entrat a Cal Forne.

Be molt be, si ,si hem menjat el menú, molt complert i ben presentat, el tracte familiar i el preu correcte . EL RECOMANO.