Gente muy simpática y agradable, el menú muy rico, lo que no me gustó es que no haya opción a comer otra cosa,
Gente muy simpática y agradable, el menú muy rico, lo que no me gustó es que no haya opción a comer otra cosa,
Cuando se habla de algo 3 bes... Todos sabemos lo que significa... Siempre se dice que eso es una utopía. Pues bien, bueno todo lo comible, bonito el paisaje, entorno y local... Y desde luego por lo bueno, lo bonito y todo el conjunto, calidad, mucha calidad, barato. Por lo tanto alguna utopía se hace realidad. Gracias por el trato.
Fenomenal, nada más llegar nos preguntaron si llevábamos la muda limpia (espíritu abierto) nos aclararon..... El jefe de sala un shouman. La comida rica. Muchas risas. No podemos pedir más....
La aldea donde se encuentra esta bastante apartada de la civilización. Desde león tardamos una hora y por carretera de montaña. Si tengo que destacar lo bueno me quedo con el servicio y la calidad-pre cacio. Detalles que no nos gustaron.... En el bar dejan fumar lo que es bastante molesto. Los baños estaban algo abandonados, sin jabon) y no había carta. Te van sacando platos sin preguntar.... Algo curioso pero esta todo muy bueno
Genial. El sitio bonito, el local acogedor, la comida muy bien, el personal espectacular. Un gran descubrimiento
Hola por suerte hemos pasado unos días en este bonito y acogedor restaurante. Destacamos la profesionalidad y el buen trato por encima de todo, en especial debemos recomendar sus asados que nos consta su alta calidad de la materia prima que utilizan, y su variedad en guisos, los cuales nos embaucaron desde el primer día que llegamos. Por supuesto lo catalogamos como lugar de referencia por su alta calidad gastronómica y por su atención y profesionalidad a la hora de atendernos. Desde Mérida ( Badajoz) nos comprometemos a volver y hemos de destacar que gracias a la cantina el canton, no hemos añorado en ningún momento la asuncia de nuestro jamón ibérico de las dehesas de Extremadura, que nos acompañan en nuestros viajes. Recomiendo a todo el mundo una visita, se en la fecha que sea.
He estado este fin de semana y es la bomba, lo recomiendo a todo el mundo, la gente es espectacular y la comida es muy sabrosa y divertida.
Un sitio excelente. La comida riquísima y muy divertida. Un lugar ideal para comer los 6 platos hasta hartarte y luego bajar la comilona con un buen paseo con el perro, llaneando hasta el pantano de casares. A la vuelta un cafetito a la luz de las velas y "más contentan que un ocho" para casita... Lo dicho, un lugar perfecto para pasar un agradable domingo.
He estado este verano pasado, comiendo su degustación del día, realmente económico (quizás demasiado), comimos una ensaladilla como la que hacia mi madre y costillas asadas, luego nos dieron una tarta de chocolate de las de verdad, vino, y café todo por 8 euros. Todo muy bueno y casero. Recuerdo la terraza, es un sitio muy especial. Vuelvo en agosto.
El viernes pasado preparando una ruta para el fin de semana un colega nos propuso llegar a pajares (Asturias), un cliente del local en el que estábamos nos recomendó pasar por el cantón, todo muy extraño, nos comento que seria algo diferente. Lo cierto es que nos metió la curiosidad en el cuerpo. Reservamos y nos presentamos. ¡¡¡ sorprendente en todo!!! Nuestro pensamiento era llegar, comer, viajar a Oviedo y regresar. Pues nada de nada. Nos quedamos hasta el domingo, cuando nos recibieron mi novia acongojada, por no decir otra palabra, a los cinco minutos todos como en casa, la comida una pasada 6 o siete platos, el trato fenomenal, el local una locura, y el paisaje algo desconocido. Les comentamos que seria divertido un fin de semana en este valle, rápidamente nos propusieron una ruta muy especial, subir a la estación del brañilin, bajar a pola de lena, regresar por caldas de luna, tomar un baño en el balneario, hacer fiesta en la cantina, dormir en casa de matilde (creo que se llama mesón gonzález), ver un museo etnográfico, y regresar a Valladolid por las hoces de vegacervera. Por unanimidad y tras pasarnos un presupuesto súper económico, decidimos hacerles caso, rápidamente nos proporcionaron y gestionaron alojamiento, entrada al balneario, la fiesta todo. Y a un precio sorprendente, pues nos dijeron que los moteros y las embarazadas, montañeros y no recuerdo que más tienen un precio especial. La fiesta solo decir que termine de romano y mi novia de griega.
Por casualidad este otoño pasamos mi marido y yo, por cubillas de arbas, pedimos para comer y nos comentaron que ese día no seria posible, que es recomendable reservar. Nos fuimos un tanto desconcertados, pero también con una gran dosis de curiosidad, porque nos atendió un señor muy serio vestido como un árabe, además el local estaba lleno de velas encendidas. Este fin de semana y previa reserva, nos fuimos a celebrar el cumpleaños de mi marido con mis hijos y unos amigos. Cuando se enteraron en el local lo que celebramos un cumpleaños rápidamente le pusieron una cuelga que ellos denominaron el “toisón del ajo” formado de cucharas de madera. Nos sugirieron dejarles entregarle los regalos, y cada regalo fue un estruendo. Le sacaron una tarta con un montón de velas, y la tocaron una canción con un instrumento antiguo ¿rabel?, las letras de la canción muy divertidas y picarescas. La comida más que abundante, muchos platos, varios postres, todo riquísimo especialmente la morcilla con chocolate (creo que se llamaba crotus pastores) y el postre de manzana con cecina. Todos salimos encantados. Lo más divertido, fue la bronca que nos echaron por no avisarles de que celebraban un cumpleaños, pues nos hubieran preparado algo especial. ¿más?