Restaurante: Cantina Mariachi

Fuimos porque parecía tener una gran carta y la imagen del local es espectacular. Cuando entramos únicamente tienen 3 mesas en el interior, una al lado de la otra, así que casi que puedes comer del plato de el de al lado. Estando allí comiendo echaron a un grupo porque tardaban mucho, y le pidieron a una familia que estaba con tapas que se dieran prisa en comer porque querían sentar a un grupo que estaba esperando. La comida incomible, de hecho nos sentó mal: nachos sin gracia, burritos a poco hacer y con las tortillas crudas, la carne en mal estado... El trato del personal es nefasto, cuatro camareros para tres mesas, todos allí mirándote sin hacer nada y con una escalera portátil todo el rato de arriba para abajo e incordiando a los clientes. No volvería por nada del mundo, ya que encima del mal trato, la situación incómoda de comer corriendo porque te están echando, y de que la comida estaba en un estado muy lamentable; el precio no es para nada económico. Un 1 de 10 y le doy el punto por la decoración, porque por lo demás un 0.