Todo correcto. Buena comida y buen servicio. Precio normal. Potes no es un sitio barato y cenar dos personas bien por 40 euros, no es caro.
Todo correcto. Buena comida y buen servicio. Precio normal. Potes no es un sitio barato y cenar dos personas bien por 40 euros, no es caro.
La relación calidad-precio es optima, comimos cerca de los ventanales que dan al rio las vistas son espectaculares, comimos un cocido extraordinario por 18 euros.
What a super place for a drink or a meal, bar staff great. Restaurant super food brilliant. Whatdid we have? Liebanese stew. Mushrooms with garlic, chichen, black pudding, fish ,it was all super. Restaurant staff great funny helpfull. But don't go there if your a stuckup your backside brit tripper, cos we will all take the piss.
Me gusto mucho la comida en su punto, la ensalada de la casa tiene de todo la recomiendo, pero lo mejor el servicio, una camarera muy atenta. Una carta de vinos aceptable, con vinos de rioja pero tiene vinos de la zona , que es lo que suelo pedir. Por cierto muy recomendable saben hacer vino. Picos deitzen da. Postres caseros buenos. Por decir algo que mejore, tener pan integral mejoraría mucho, y no sirve de nada reservar si quieres esperas a la mesa que tu quieras. Cuando vas aun restaurante recomendado sabes que se come bien, si ademas el servicio es bueno se puede recomendar.
Muy bien todo instalaciones vistas preciosas al rio, el cocido espectacular de bueno, la atención del. Personal. También muy buenos muchos bares por la zona pero este merece mucho la pena
Tomamos un único entrante que era la tabla de la casa e hicimos bien porque venía bien surtida. Mi chico se comió un chuletón de 800gr. Que le supo a gloria, yo opte por el solomillo de ternera que estaba como la mantequilla de tierno. Ya casi no podíamos con el postre por lo que me quedé con ganas de probar el canónigo pero nos ofrecieron unas copas de crema de orujo que estaban de rechupete. La amabilidad y la atención de sobresaliente. Por poner una pega... Que no aceptaban la amex y me quedé sin los avios, jajaja... Pero vamos... Todo genial para una noche estupenda.
Llegamos a las tres de la tarde, nos dijeron que estaba completo y nos ofrecen mesa en un comedor interno. Como no nos interesaba, nos ofrecen mesa en el mirador (había 2 mesas libres) no entiendo para qué las guardan, máxime siendo la hora que era. Comimos cocido lebaniego estando bien y las raciones amplias excepto la sopa que era "aguachirri". Lo demás, bien.
No doy credito con estos cantabros, nos están superando, un servicio excelente, las vistas desde el cenador son la leche. La comida sin tacha y las racciones harto generosas.
Es uno de los mejores restaurante por no decir el mejor de la zona. Por su cocina tradicional, por su gente que son encantadores y para ellos no hay nada mejor que sus clientes ya que todo son atenciones.