Es perfecto! Trato inmejorable, cocina exquisita... Decorado romántico y música de ambiente ideal!!... Hay un menú al medio día de 19'50€ que está super bien!! Cocina casolana!!
Es perfecto! Trato inmejorable, cocina exquisita... Decorado romántico y música de ambiente ideal!!... Hay un menú al medio día de 19'50€ que está super bien!! Cocina casolana!!
La comida muy buena y abundante, el precio en consonancia. Fuimos con amigos y otra vez con familia y volvemos a menudo
Somos un grupo de 12 amigos que cada año realizamos una subida al valle de Aran con una organización ejemplar. Hasta este año para la cena del sábado siempre habíamos elegido el restaurante casa Irene de Artíes, pero este año quisimos innovar y elegimos para la cena del sábado casa Jimena. Personalmente reservé hace un mes el restaurante y el pasado sábado, puntualmente a las 22. 30, comparecimos todo el grupo para disfrutar de una cena agradable. Cual fue nuestra sorpresa que al llegar nos comunicaron de muy malas maneras que nuestra mesa estaba ocupada por el primer turno y no podían asegurarnos la hora de comienzo. Como organizador del evento me sentí avergonzado y siendo las 23.00 horas sin tener noticias de nuestra mesa decidimos llamar a otro restaurante. Además, cuando le pedí explicaciones al dueño de lo sucedido me señalaba como excusa unas manchas de sudor horribles en su chaqueta que nos repugnó enormemente. Nos fuimos a Era Lucana de Vielha cuyos propietarios nos acogieron con toda la amabilidad y profesionalidad del mundo, fue sin duda el mayor acierto del fin de semana. Os lo recomiendo. Respecto a casa Jimena, desde luego no volveré más y ruego a su propietario, que no siga tomando el pelo al cliente, el sábado tenía " muy cabreado" a todo el primer y segundo turno por la lentitud manifiesta y falta de profesionalidad. Sirva esta opinión (y parece ser que no es la primera) para alertar a todo aquel que tenga la intención de acudir a este restaurante, que si puede evitar ir que no vaya ya que existen en Vielha y en el valle innumerables lugares que te hacen pasar una velada agradable.
Me suena a patraña, la opinión que vierte esta persona pues, vivo en Valencia, y he subido varias veces a vielha, hemos comido y cenado varias veces en casa jimena y, siempre hemos comido muy bien y el trato ha sido exquisito.
Lo siento pero he de hacer constar que el servicio en este restaurante es horroroso. Nos hicieron esperar 40 minutos cuando ya habíamos pedido de antemano la mitad de la cena. Ninguna consideración a la hora de servir, no esperaron a que acabáramos el primer plato y ya teníamos el siguiente en la mesa, que si fuera algo caliente o de preparación delicada pues vale, pero no, eran ensaladas. Me fui muy enfadada y desde luego no lo recomendaré.
Totalmente de acuerdo, estuve el pasado sábado 17/03/2012 con un grupo de amigos y aunque teníamos reserva desde hace más de un mes a las 22. 30 horas eran más de las 23 horas y estábamos sin mesa. Parece ser que todos los fines de semana le pasa lo mismo. Es una gran tomadura de pelo este restaurante, no puede ser que un fin de semana relajado te lo conviertan en toda una pesadilla
El local acogedor, el servicio super atento y la comida exquisita, o sea, que el precio.... No tiene precio!! Recomendado a todos los que nos gusta la buena cocina junto con un muy buen ambiente
Nosotros íbamos buscando un restaurante típico de la zona y encontramos casa jimena... Y era lo que buscábamos. Los calços con romesco espectaculares y una cocina a la brasa inmejorable. Si buscáis un local tradicional y con productos elaborados de forma artesanal es el lugar idóneo. El trato muy familiar y distendido.
Es un restaurante donde la calidad-precio es excesiva muy costóso para la calidad de los productos y la realización de los platos. Su decoración es adecuada, aunque un poco discordante con los materiales naturales, piedra y madera de sus paredes y techos..... Su atención adecuada.
Hola Lorena, creo que te pareció caro pero no por la calidad de sus productos, las materias primas son excelentes, en cuanto a la decoración con su fuego a tierra y sus asientos blancos aportan una luz y una alegría al local que solo con piedra y madera no se logra, seria un local muy oscuro, yo creo que esta muy equilibrado.
Completamente de acuerdo. Es demasiado caro para lo que ofrece. 12€ por unos huevos fritos me parece excesivo. 19€ por un pincho de solomillo frio también me parece excesivo. Y los 9€ por un trocito de pastel de chocolate ya es una pasada... La materia prima será buena, igual que en los otros muchos restaurantes de la zona donde la relación calidad-precio es mucho mejor. La ambientación del restaurante no justifica los precios que se aplican. La funda blanca de las sillas debería ser blanca y no con manchas de la última calçotada.
Pues yo opino que es una decoración de lo más exquisita, ya no existen en el valle restaurantes en antiguas bordas y respecto a si es caro o barato yo creo que eso va en función del bolsillo que tiene cada uno y efectivamente al ser fundas blancas se ensucian, lógico, a veces hay que ser un poco más comprensivo y pensar en como tenemos la propia casa a veces siendo solo nosotros quien la utilizamos.
Debo decir que este restaurante es una de esas maravillas que uno encuentra en la vida. No sólo la comida es buena, si no que el entorno que ha creado david, su propietario, es excelente. Nada más entrar te sientes como en casa, o mejor que en casa, porque incluso la música está escogida con buen gusto. También los vinos son exquisitos. Os recomiendo "los pies de cerdo" a la brasa, una maravilla para el paladar más exigente. Gracias, David, por haber creado ese espacio. Te auguro mucho éxito. Ester y Àngel
La verdad que el valle es una maravilla. Hace unos treinta años que lo visito y nunca deja de sorprenderme. Una tarde que no subí a esquiar me dediqué a pasear por el casco antiguo de Vielha y lo han arreglado todo y está precioso. En éste paseo descubrí dos nuevos locales que no conocía, uno Casa Jimena, en el que almorcé, hacía tiempo que no comía tan a gusto. De primero pedi una tortilla de cebolla, maravillosa, hecha con huevos de gallinas en libertad. Después comí una carne de ternera con unas patatas asadas a fuego lento y doradas posteriormente al carbon, no se que estaba más bueno, pero creo que si tengo que escoger me quedo con las patatas y de postre una sublime tarta de chocolatre negro. Hice buenas migas con David. El único fallo que encontré es que le pedí un gintónic para rematar mi magnifica comida y me dijo que no tenia, que un poco más abajo su hermano Rafa tenia un local, Devins, que hacia los mejores gins del valle, así que me dirigí hacia él. Parece una tienda antigua de pueblo, entrad, al fondo tiene un coqueto salón con cuatro mesas, unas cristaleras enormes que dan al rio, hay que verlo..., muy buena música y sin duda, el mejor gintónic que me he tomado en mi vida, el local es precioso y Rafa te hace pasar las horas como si fueran minutos. Asi que me repito, el valle nunca deja de sorprenderme.
Ambiente cálido, tanto como la atención del personal. Platos elaborados con dedicación y esmero, excelente presentación. Muy recomendable, ideal grupos previa reserva. Selección de vinos inmejorable. Felicitaciones a sus propietarios.