Excelente servicio. Muy cordiales, presentación y limpieza impecable. Magníficos platos, para volver. Un 10.
Excelente servicio. Muy cordiales, presentación y limpieza impecable. Magníficos platos, para volver. Un 10.
Todo muy bien, lo único muchas mesas para tan poco local. A pesar de esto vale la pena comer lucio. Altamente recomendable
Un lugar emblemático, que mantenie su atención y el trato con los clientes como siempre. Con la tradición y el saber estar de toda la vida. Para los amantes de la cocina tradicional, con el gusto por lo auténtico.
Estuvo bien, a pesar de tener reserva, comimos con una de retraso, debido a la gran cantidad que había en el local. La comida correcta, pero tampoco al nivel de espectacular. Como sitio típico de Madrid se recomienda, pero tampoco para repetir.
Todo estaba muy rico, el camarero nos aconsejo sobre los platos que podíamos compartir y los más típicos del restaurante. El sr. Lucio muy amable se hizo una foto con nosotros. Todo estupendo.
Bien en general, pero un poco incómodos en las mesa, todo muy justito, la carta justita también, bueno comimos bien y a la hora de pagar con tarjeta te tienes que desplazar a una especie de caja, bueno un poco molesto pero en general bien.
La comida me pareció muy bien, el servicio puede mejorar, en especial el camarero no permitia tiempo de disfrute y presiona en exceso para cobrar y retirar cubiertos.
Nos gustó mucho el local, el servicio fue muy bueno y la comida riquísima. Calidad precio totalmente acorde. Por poner un pero me pareció que las mesas están muy juntas y se oye todo
Llama la atención la presencia del dueño, con sus años y aún te recibe, te atiende y aconseja y te riñe si no terminas el plato. La comida buena, pero no extraordinaria. No lo consideraria el mejor restaurante del mundo (como nos dijo en varias ocasiones el señor lucio). En cualquier caso, fuimos por curiosidad, para probar, y tal como comento un politico conocido sentado justo al lado nuestro, "aquí el espectáculo eres tu". El servicio bueno y atento, pero, tienen tanta demanda, que el espacio se queda pequeño, demaseadas mesas y todo un poco estrecho. Por lo demás, bien, siempre que sales con amigos disfrutas, independientemente del lugar o de la comida.
Servicio y atención genial, comida y bebida perfecta! Recomendable 100%. Volveremos sin duda en nuestra próxima visita a Madrid.
En casa lucio no hay sorpresas siempre se come bien y es agradable seguir viendo al propietario al pie del cañón.
La carta es cara, aunque se come bien, los camareros no son muy amables. Lavabos sucios y pequeños. No repetiría.
Sitio castizo para ir una vez y conocerlo, buen servicio y ambiente. Al final de la cena, lucio visita cada mesa saludando a cada uno.
Está bien si vas a Madrid, quieres ir a un sitio conocido y comer bien a un precio razonable. Los famosos huevos estrellados están buenos, pero mi madre los hace igual...
Todo un referente en la gastronomía madrileña excelente servicio, razonable calidad precio, recomendable sin duda.
Fuimos varios amigos a casa lucio el pasado viernes 27 de febrero de 2015. Teníamos reserva de mesa para las 22. 30 y nada más llegar ya nos atendieron y pasamos directamente a la mesa. El servicio en todo momento excepcional, todos los empleados muy atentos y muy rápidos. La comida estaba riquísima y al final nos invitaron a unos chupitos y pagamos menos de lo que esperábamos en un principio, teniendo en cuenta la fama del restaurante, muy buena relación calidad/precio; así que la valoración global es excelente, quedamos muy satisfechos.
Molt bo el menjar, pero pagas el nom casa lucio. Bon servei, amabilitat. I agradable veure al sr. Lucio que cada día va al restaurant.
Excelente atención muy buena. Comida divina ambiente muy español atención muy personalizada de su dueño para el día domingo es un must en Madrid
Lucio un crac, que señor más impresionante. Un encanto. Los huevos buenísimos pero los callos, de chuparse los dedos. En definitiva una gran noche.
Los huevos estrellados muy ricos. El pan con tomate rico, pero lleva tanto tomate trirurado que, por ejemplo, con el jamón se pierde el gusto de éste. La carne.... Se puede mejorar. En general pienso que está sobrevalorado.
Muy. Bueno, excelente servicio muy buena atención al cliente. Precio justo con relación a la excelente comida. Yo. Lo recomiendo a mi familia y amigos cuando visitan Madrid, yo vivo en Gijón que también se come muy bien.
Muy satisfecho con todo, nos falto hacernos una foto con el señor lucio, pero estaba comiendo con unos amigos y no nos pareció correcto interrumpirle.
La expectativas estaban muy altas. La comida es muy buena, en nuestro caso, los huevos, callos y alcachofas. Todo rico, pero no sobresaliente. El precio, tampoco es desorbitado.
A pesar de que estaba lleno, no tardaron en atendernos. Los platos son de buena calidad y a un precio muy razonable (incluido el vino).
Buen restaurante. La carne estaba deliciosa. Por lo demás todo bien huevos al estampido, vino casa lucio, fotografo etc
Personal muy agradable y restaurante muy típico. El señor lucio todavía anda por allí revisando y agradeciendo la visita a su restaurante. Volvería a ir.
Estuvimos en casa lucio y el trato fue excelente, la comida buenisima incluida foto con el sr. Lucio, lo recomiendo a todos los que os guste comer bien; el precio dentro de lo normal; a la carta y un buen vino blanco de rueda platos huevos estrellados mero a la plancha vino blanco rueda un pan excelente
Estuvimos en Semana Santa en Madrid y nos pareció en general muy caro y bastante malo, estuvimos en lucio la última noche de nuestra estancia y ojalá hubiéramos ido cada día a comer, fue bueno, no caro y trato agradable, los huevos estupendos, unas setas a la plancha muy aceptables, en fin merece la pena pasar por casa lucio.
En un desplazamiento de andalucía a Madrid, después de varios intentos en otras ocasiones para conseguir mesa en este famoso restaurante, pudimos visitar y comprobar los dichosos huevos estrellados de lucio. Con todo respeto a quienes puedan opinar lo contrario, he de decir que mi desilusión fue absoluta, tanto por la calidad y cantidad como por precio. Calidad mediocre, cantidad la justa, servicio regular y precios desorbitados. Por mi parte jamás volveré a casa lucio ni se lo recomiendo a nadie que tenga la idea de acudir a comer en Madrid. Es una ciudad con muy buenos restaurantes para comer, por ejemplo " cantina la traviesa", no es barata, pero muy buena calidad, un servicio excelente y un ambiente fenomenal. En este lugar cenamos y deleitamos unos manjares que en casa lucio no hay.
Fui con mi mujer la semana pasada y comimos estupendamente. Habíamos leído algunas opiniones en las que se quejaban de que era muy caro, las mesas muy pequeñas, los huevos nada del otro mundo, ... Pues de precio, teniendo en cuenta que hoy en día hasta en el restaurante más cutre si vas a la carta y tomas vino no sales por menos de 60 euros dos personas, pues no, no fue caro. Tomamos unos huevos con patatas, unos callos, cochinillo para dos, ensalada, vino , postres y pacharán y pagamos 100 euros. La mesa que nos dieron (de fumador) estaba arriba, al lado de la ventana, buen tamaño (el normal de una mesa de restaurante), a buena distancia de las otras. El personal, correcto. Un poco rollo el que habíamos reservado para las tres y media y tardaron 20 minutos en dárnosla, pero como sólo queríamos si era de fumador, pues se perdona un poco. Los huevos, pues eso unos huevos muy ricos estrellados en unas patatas muy ricas (9 euros), que se comen con mucho gusto y si los comes en casa pues también están ricos, pero eso también lo puedes aplicar a tomarte una cerveza o un refresco en casa comparado con tomártela en una terracita, pues que sabe mejor en la terracita, y más cara. Los callos también muy ricos. El cochinillo RIQUÍSIMO (Y ESTO NO SE LO HACE UNO EN CASA). Estaba tierno, la piel en su punto, pequeñito que se deshacían los huesos. Nos encantó. Nos lo pasamos muy bien. El único pero que pondría es que al empezar a comer tan tarde (nos dijeron que sólo se podía reservar a las 2 y media o a las tres y media), a las cinco no tuvimos oportunidad de hacer una sobremesa sosegada, pues aunque no nos echaron ni nada de eso, nos sentimos un poco incómodos con el personal recogiendo, y el camarero cobrándonos porque "iban a hacer caja".
Nada del otro mundo y mucho cuento. Los huevos rotos ya me dirán lo qué tienen, el solomillo sin guarnición que da pena verlo. Muy caro para lo escueto. Bastante mal.