Escándalo de precio dos personas, una ensalada de tomate u atún y una lubina a la sal vino:marques de riscal blanco 182,00 euros!!!!!!!!!
Fue decepcionante. Un servicio de vergüenza. Nos tuvieron en la mesa casi una hora sin llevarnos ni la bebida. Tuvimos que reclamar los platos porque no nos servían. Ponia en la carta que la merluza era de pincho y fresca, pues no, era congelada. Y para terminar carísimo. No volveré.
Buen menú. Una cosa que no me ha gustado del menú de la casa es que la única bebida incluida es vino. Ni agua, ni refrescos, ni cerveza -solo vino (a pesar de que suelen ofrecer una cervecita al traer la carta "para empezar"). Los que no les guste el vino que añadan unos 2-3 euros por menú del día...
Ya conocía el restaurante desde hace tiempo, pero ahora el punto y la textura de los platos ha mejorado mucho. Creo que hay un cocinero nuevo con experiencia en importantes restaurantes. El único pero es que resulta un poco caro. Hay que pagar la situación, evidentemente.
El menú es adecuado al precio. Pero son unos ladrones, si tomas menú y no pides vino que es lo que indica el menu te facturan lo que pidas, aunque sea agua no te avisan que no esta incluido ni te ponen el vino ofertado en el menu. Es el restaurante típico que te hace dudar de todas las cartas y anuncios porque engañan. Nosotros en vez de vino pedimos cuatro claras y un agua y nos facturaron 16 euros más y no nos pusieron el vino ofertado en el menú
No recomendable. La comida no estaba mal pero excesivamente cara. Tuvimos el error de salirnos del menú. La carta no llevaba precios a excepción del menú.
Hemos comido mi pareja y yo hoy, y ha sido el restaurante donde más estafados nos sentimos. ¡65 euros por un entrante y arroz para dos! En la vida! El servicio de pan 2x 1,80 = 3,60 (sólo hemos cogido un trocito de cuatro, incluyendo embasados, pero bueno, esto lo hacen en muchos sitios); el tomate raff con verduras no era tal tipo de tomate, muy mal; pedimos al llegar dos cañas de cerveza y la sorpresa al ver la cuenta fue que nos cobraron dos tercios de importación 2x 2,90n = ¡¡5,80 por dos cañas!! Y para rematar las sorpresas, el arroz senyoret para dos personas era de risa, un pegote para cada uno en el plato, como si fuera arroz para uno, las gambas bien, pero el arroz encima lo hacen algo duro. Increible lo del arroz, en ningún sitio te cobran 32 euros por el arroz y ponen para dos personas como para una. ¡Qué estafa! Y para dos mesas que habían, servicio muy lento para pedir de la carta y para todo. Recomendado no ir nadie.
Autentico fiasco, la peor experiencia de mi visita al campello, población que visito al menos 2 veces al año. El restaurante esta magníficamente situado, su decoración y ambientación francamente buena, pero aquí acaba todo lo positivo. El servicio empezó siendo lento, a pesar de que solo había 5 mesas ocupadas en terraza y 2 en el interior. La comida, uno más que utiliza nombres grandilocuentes para enmascarar una comida normalita, escasa y a precios de gran cocinero. Ejemplo “calamares fritos de potera con salsa de reducción de vermut”. Significado un vulgar calamar a la andaluza con una mancha en el plato de color naranja. Estoy acostumbrado a restaurantes donde la ración es escasa, pero aquí resulta ya una burla. Luego el colmo, la carrillada que personalmente me recomendó el sr. Mariano, un trozo de patata con una pequeña porción de carne guisada nadando en una vulgar salsa marrón. A su pregunta sobre que me había parecido por cortesía únicamente le hago notar que la carne estaba fría, a pesar de que se notaba que estaba recalentada, me suelta bueno pero de sabor bien ¿no? Para remate en el único momento que mostraron solicitud en el servicio fue, después de pedir la cuenta, el repetido interés en hacerme saber que habían olvidado cobrarme el agua y que lo añadirían a mi cargo en la tarjeta, cosa que por supuesto realizaron, eso sí emitiendo una nueva cuenta ya con el agua añadida, dado el servicio y la atención me extraño que no lo añadiesen.
¡Verdaderamente excelente! Tanto el manjar como el trato personal. De primera calidad; excelentes vistas al mar y muy acogedor. ¡Recomendable! Buena calidad-precio.