opiniones sobre el Restaurante Casa Mirones

Excelente!!! La comida genial, la bebida genial, el trato estupendo. Recomendable totalmente. Parada obligada en pasaia San juan.

Estuvimos en pasaia un par de días y el segundo comimos aquí. Genial para un plan con amigos: un domingo de mariscada :)

Parrilla de marisco muy apetitosa y vinito albariño muy fresquito sentado en la terraza y viendo el temporal fuera una maravilla y un gustazo. La atención del camarero estupenda y cafés y chupitos a cuenta de la casa. Muy buen recuerdo. Gracias

Hemos estado recientemente y nos ha sorprendido gratamente tanto la atención como la parrilla da de marisco que nos sacaron. Lo más destaca ble la calidad y cantidad de las raciones que te sacan tanto en los platos que vimos pasar a otras mesas como la parrilla da que comimos. La ubicación del restaurante es única y la decoración un poco especial que te puede gustar o no pero creo que es lo de menos porque la comida y la atención son muy buenas a pesar de que el día que fuimos estaba a tope de gente y un camarero muy amable nos sirvió y atendió a todos haciendo la espera amena. Las parrilla das son su especialidad porque van saliendo como churros. En fin muy recomendable para comer marisco. Repetiremos

Antes de cambiar de dueños se comía muy bien, ahora ya no se puede ir local , comida mala y en malas condiciones, para no volver nunca

Hemos estado este sábado pasado comiendo en este restaurante que no conocíamos porque somos de Bilbao y no conocíamos el pueblo. La ubicación es curiosa y un poco especial pero salvo eso el resto solo podemos decir que comimos estupendamente un menú de 20 euros muy variado y con unas raciones grandes. El camarero fue muy amable y nos hizo sentirnos como en casa. Nos gusto mucho y pronto volveremos.

Recientemente hemos comido en casa mirones y nos ha sorprendido muy gratamente porque no nos esperábamos la mariscada que nos sacaron. Era tremenda tanto por el sabor y calidad como por el tamaño. El lugar muy bonito y el servicio agradable. Volveremos.

Nosotros también hemos ido por colectivia y tenemos que felicitar al restaurante por ofrecer a ese precio el menú que tomamos que fue un lujo. Else vino era corriente pero por el precio no se puede pedir más y la valoración global muy born porque fueron amables y correctos los concertos. Nos. Toco ins mesa en la teressa y pudimos disfrutar de las bonitas vistas al mar. Volveremos seguro.

Estuvimos el domingo pasado con una oferta de colectivia, ya por teléfono me preguntaron si era de colectivia nos dieron una mesa muy mal situada, el vino blanco era pésimo y sin cubitera se calentó enseguida, los entrantes escasos y malos y de plato principal la merluza con hongos no la pude comer, los hongos estaban ácidos y pasados, olían mal, se lo dije al camarero y me dijo que su jefa había dicho que los había cocinado por la mañana ni siquiera me preguntaron si quería otra cosa, una vergüenza de restaurante, que colectivia tome cartas en el asunto o perderán muchos clientes, a mi me da miedo comprar otra vez en colectivia. Saludos yolanda

Bien la comida el water tenia la puerta con el pestillo estropeado, los camareros bien, el sitio muy bonito

Nada más entrar nos pregunta si éramos los de la oferta de colectivia al decirle que si nos trataron como un cliente de 2ª: en la peor mesa estando el restaurante ocupado solo 3 mesas, le pedimos una de tinto y otra de lambrusco, nos dice que solo entraba una (cosa que ya sabíamos y la pensábamos pagar aparte) traen el tinto a temperatura ambiente 30º, le comento si no tienen alguno frio y muy profesional me contesta que la nevera de vinos la tienen solo para los vinos-vinos, a lo que le contesto si lo que me han traído no es vino-vino, y no eso es un vino muy corriente me dice. Desde entonces hasta que le tuvimos que pedir el café nos ignora. Resumiendo. Profesionalidad: nula limpieza: 2 calidad: 5 cantidad: picoteo primeros bien, la parrillada escasa (2 almejas, una cigalita, 4 langostinos y una vieira) total 85 euros muy caro para lo recibido

La comida exquisita, el servicio muy bueno. Lo único pasable, los servicios; la puerta de senoras no funcionaba, no había papel ni jabon. Es pena porque todo lo demás nos gusto muchisimo. Volveremos, seguro!

Nos gusto mucho la variedad de pescados que ofertaban aunque al final nos decidimos por el besugo para dos personas que fue un acierto total porque estaba de muerte. El camarero estuvo muy pendiente y de verdad disfrutamos de la velada porque ver atardecer en pasajes en el mirador del restaurante es un verdadero lujo. Gracias a todo el equipo y en especial a tomas por atendernos tan bien.

Una alternativa atractiva si la meteorología acompaña. El lugar es de una gran belleza y las viandas que se pueden catar son de primera. Lo más típico es el marisco y lo sirven en enormes bandejas a la plancha. Merece la pena acercarse dando un paseo. El servicio muy atento y el precio acorde a lo que supone el marisco. Buen surtido de albarinos y vinos blancos. Para volver a repetir.

Mala relación calidad precio. El servicio es aceptable pero excesivamente caro en relación a la calidad. Paella bogavante y botella sidra, agua y cafes 92 euros

Reservé una mesa para una comida familiar. Hacía un día espléndido, tenía un gran recuerdo de ese restaurante en cuanto a la relación precio calidad, y el lugar y las vistas de la terraza son estupendas. Lo cierto es que ya me habían advertido que había cambiado de dueños y ya no era lo de antes. Aún así.... Pequé... Al llegar nos sorprendió lo hortera, cutre y desaliñado (por no decir sucio) del lugar. El camarero nos sacó la carta y..., ¡¡¡¡ increíble!!! Yo no había visto este restaurante en la guía michelín.... Y es que a juzgar por los precios debería haber estado.... Uffff.... Era más de las 3 de la tarde y con niños.... Aún así por primera vez en mi vida.... Nos levantamos y nos fuimos..., y por lo que veo..... ¡¡¡¡ que bien hicimos!!!! ... Un auténtico insulto para cualquier donostiarra

Fui con amigos este verano a comer una mariscada para celebrar mi cumple. Me había comentado un conocido que se comía genial y que razón tenía. Las vistas increíbles, el servicio... Me sentí como un rey camareros atentos simpáticos y muy profesionales. La comida fue extraordinaria comimos un plato que tenía jamón, croquetas, pimientos, antxoas, riquísimo. También comimos ensalada de txipiron y langostinos muy rica y abundante y para terminar una mariscada super completa bogavante, langosta, nécoras, langostinos, gambas, gambon, percebe camarón...... Una pasada todo ala plancha muy bien de cantidad y calidad. Un sitio que recomiendo merece la pena a y la degustación de postres que ricaaaaaa

En general bien, porque el camarero fue muy atento con nosotros, la mariscada estaba bien, lo único malo es que sacan todo a la vez y hay partes de marisco que se van enfriando o bien se van secando como es el caso de las gambas. Nos sorprendió el precio de los postres, bastante caros pero luego vimos el tamaño de ellos y es potente, y los helados están muy buenos, El paisaje de la terraza es espectacular, ahora bien, la decoración del restaurante es "¡¡¡curiosa!!! ". La espera se nos hizo larga, menos mal que teníamos todo el día para nosotros y no nos importó, pero desde que llegamos a que nos sirvieron el marisco tardaron 3/4 de hora. Pero bueno, merece la pena.

Establecimiento ortera y poco cuidado y la verdad es que la limpieza y el servicio dejan mucho que desear. Y precios escandalosamente caros en los tiempos que estamos. Muy mal. Mi recomendación 0

Estoy pasando las fotos de las vacaciones al ordenador y que lastima que no pueda compartirlas. Con lo bien que se come en el país vasco: que vergüenza de local. Subimos porque todos estaban llenos y los del último restaurante que entramos a preguntar nos dijo que fuésemos que siempre tienen sitio, de entrada sospechoso, preguntamos porque extrañados y nos dijo que porque era caro. No nos importo demasiado porque ya era tarde y suponíamos que si caro comeríamos bien. Al subir vimos unos menús. Llegamos y el local estaba a medias, extraño porque estuvimos por lo menos en otros 4 más y estaban llenos. Hacia calor y olía a cerrado. El local todo rosa y con todo tipo de horteradas del todo 100, bien necesita una reforma. Aun así nos sentamos pensando que con esos precios y un local así seria porque todo lo invierten en dar bien de comer: error. El camarero no nos trajo la carta, nos pregunto que nos apetecía y sin dejarnos responder nos insistía en mariscadas. Le comentamos que habíamos visto que tenían unos menús y nos dijo que a esas horas solo servían a la carta. Se la pedimos pero nos insistía en la supermariscada por 100€ para los dos todo incluido. !! Picamos!!. Nos dijo que todo seria a la plancha. Nos sacaron un centollo relleno, quemado por fuera pero congelado, con hielo y todo, por dentro. Los langostinos eran cocidos y recalentados, no se podían ni pelar, y el bogavante olía a amoniaco. Todo incomestible. Indignados pero educados le pedimos la cuenta, y resulta que ya no eran 100€ eran 132€, no entraba en los 100€ ni el vino ni el iva. Indignados por este nuevo ataque, le comento el fiasco que era la mariscada. Nos contesto arrogante que todo era fresco, a lo que le pedimos nos enseñase un bogavante vivo. Cogió la caja con el dinero y nos trajo el cambio sin tan siquiera mirarnos. ? Porque no nos quiso enseñar un bogavante vivo? ? Acaso no tenían nada fresco y todo estaba congelado? Vergüenza de local para la gastronomía vasca! Locales así no deberían tener cabida porque dañan la imagen del resto. Lo único que me queda tras el sablazo que nos dieron es esto, intentar que a nadie más os ocurra lo mismo y atacar a este tipo de locales que se dedican a sacarnos el dinero a los turistas para que desaparezcan.

La parrillada estaba en su punto gran cantidad y variedad, no pudimos terminar lo que sacaron y nos pusieron en un recipiente para llevar a casa lo que nos sobró, todo un detalla. Calidad precio muy bien y lo recomiendo sin duda, de los mejores sitios que he comido, y tengo experiencia en restaurantes con estrellas.

En varias ocasiones he ido a casa mirones a cenar de carta y la verdad que muy bien, la comida, el entorno, las vistas... Pero con ésto de la crisis se ofertan en una página que se llama www. Deskontu. Com y cogimos el menú degustación... Que porcierto estaba muy rico, pero tengo una queja y es que estando el restaurante en la zona de dentro casi vacío, nosotros dos y otras dos mesas de dos... Sólo nos dieron a elegir la mesa al lado del baño y la siguiente, y me parece vergonzoso, pues yo había reservado sitio hacía un mes. Entiendo que no nos pusieran en la terraza con las vistas al mar... Pero tengo otros 6 amig@s que han ido a comer o cenar con deskontu y les han puesto en el mismo sitio... Entonces no es casualidad... Me parece fatal, y creo que en vez de promocionarse con esa oferta lo que están es tirando piedras sobre su tejado... Así que ya sabes si vas de carta te atenderán correctamente y te pondrán donde tu quieras... Sino al lado del wc.....

Local muy especial, color rosa, corazones y peluches dentro. Fuera, terraza con vistas espectaculares. Servicio muy escaso un camarero para los comensales, entramos a las 2:30 y salimos a las 5:45, todo muy lentísimo, pescados fríos, carne pasadísima, almejas tipo goma. Lo sentimos pero esta es nuestra experiencia, comimos poco y mal.

Como cada verano vamos a pasar unos dias a san Sebastian y por consejo de unos amigos fuimos a comer a pasajes san juan . nos habían hablado maravillas de este restaurante pero lo comprobamos in situ . el marisco estaba fresco y en su punto de preparacion , también probamos besugo a la donostiarra que estaba delicioso , muy jugoso con su refrito de cayena y finalizamos la comilona con una copa espectacular de helado artesano que ellos mismos elaboran . la verdad es que pagamos una buena factura pero nos fuimos encantados de la vida y satisfechos de habernos dado el capricho . volveremos a ir en cuanto el tiempo y la economía nos lo permitan .

Anuncian menú del día de lunes a viernes. Hoy 21 de enero lunes, pedimos menú del día y nos manifiestan que no lo dan puesto que es día festivo en San Sebastián ¿? Deplorable.