opiniones sobre el Restaurante Casa Solla

Sin ser un gran amante de la comida moderna (considero que hay mucho farsante que se escuda en la misma ), tengo que decir que casa solla es un referente muy agradable. Exquisito trato en el servicio y sin ser empalagoso, excelente comida y precio muy razonable. Es un restaurante para repetir. Pepe solla está pendiente del mínimo detalle que pueda ocurrir en la sala. Excelente

Nos cobraron los aperitivos a pesar de que la factura pone que invitan a los mismos en letra pero en la misma vienen facturados. Nos sentó fatal la comida que por otro lado estaba rica y no parecía que nos sentaría mal. Resultó que de madrugada mi pareja y yo estuvimos fatal ( dolor de barriga, diarrea ). Lo peor es que se lo comentamos y no tuvo el detalle de decirnos que otro día nos veríamos compensados.

Un sitio muy recomendable. Había leído comentarios que con el menú degustación te cobraban cosas de más. Y en mi caso totalmente falso. Hemos tomado 2 menús gastronómicos, a 74€, precio bueno, no solo por una esplendida atención, tanto del propio Pepe como de los camareros y metre. Y la calidad de los diferentes platos esta a la altura de las expectativas creadas. Sitio tranquilo, con un ambiente muy acogedor, amplios aparcamientos y trabajadores muy amables.

Fui este verano con mi pareja y todo nos pareció exquisito. El género muy bueno, las salsas acompañando al pescado espectaculares al igual que el postre de yogur con fruta de la pasión. La atención del mismo Pepe solla en la sala nos pareció todo un detalle. Sin duda repetiremos cuando vayamos a Galicia el verano que viene. La verdad es que me sorprende la opinión de pedir una hoja de reclamación en este restaurante, es la primera mala referencia que me encuentro. Saludos,

Me parece un lugar diferente, una atención por parte del mismo Pepe solla que me agrado muchisimo, es todo un detalle, su vestimenta muy de acorde y la verdad es que en Pontevedra no hay nada igual. Me gusto muchísimo, ya me gustaba con el padre pero el hijo lo ha bordado.

Hemos ido en tres ocasiones. Local bonito, servicio exquisito, ambiente muy selecto, platos muy elaborados, totalmente distinto al resto de oferta en la zona. Muy caro por lo que te dan, pero es de esos sitios que hay que visitar.

No quedamos muy satisfechos de nuestra cena en el restaurante, por varios motivos. La temperatura de la sala era baja, ya que no me eran suficientes los dos jerséis que llevaban y el día era frío y lluvioso. Falta calefacción. También algunos platos no llegaban a la mesa a la temperatura adecuada, sólo templadillos. El servicio no es es que se espera de un restaurante de categoría. No siempre andan atentos, y al principio iban muy rápidos con el menú degustación, como si quisieran despacharnos pronto. Y ojo, si pedís el menú degustación, te ofrecen queso con una sonrisa, omitiendo que no va incluido, como si hubiera uno de aprenderse de memoria el menú, para saber lo que entra o no. A la hora de pedir la hoja de reclamaciones, nos trajeron una hoja del año 1970, de la era franquista, asegurando que era válida cuando las competencias están transferidas a la xunta. Te toman por tonto, y actúan de mala fé. He presentado una reclamación a consumo, pues el no disponer de hojas de reclamaciones válidas (o no suministrarlas) constituye infracción administrativa. Al final, salimos con mal sabor de boca