Restaurante: Di Fredo

Calor, hacinamiento, mal servicio. Todo son excusas al reclamar. Es la segunda vez que me ocurre en este local al que acudía asiduamente. No pienso volver. Por cierto, no debe ir muy bien pues han suprimido los 2 turnos de cena, no aceptan tarjetas, faltan camareros,...

Se quedo en la edad de piedra, la decoración es vieja, aunque lo han arreglado ahora un poco, les hace falta quitar madera, que es lo que creo que les trae más cucarachas, un poco más de higiene, ya que vi como se le cayo un pan al suelo y lo sirvió igual a la mesa.

Para mi que he ido muchas veces, me parece un sitio genial y estoy enamorada de sus platos que esta todo buenísimo, no he tenido nunca ningún problema con la calidad, ni la sal y de segundo me suelo pedir pizza la golosa que me encanta la masa y todo lo que le ponen. El precio muy barato para tener 2 platos a elegir postre y bebida. Un saludo

Hoy ha sido la tercera y última vez que como en este sitio. El nivel tanto de servicio como de calidad va cada vez a peor. Los camareros siempre son nuevos y no se enteran de la nada, y si les pides información se van resoplando a consultar en cocina. La comida siempre está muy salada (las tres veces que he ido he probado de varios platos y no es algo casual). En la cuenta suelen cobrarte cosas que no has pedido o que supuestamente van incluidas en el precio del menú, como el pan, y luego te lo cobran aparte. Pero el colmo de todo es que hoy he encontrado un tapón de aerosol en la salsa de las delicias de brie. Se lo he dicho al camarero -nuevo- que ha ido a la cocina y ha vuelto como si nada, sin ninguna explicación ni disculpa de ningún tipo. Personalmente no suelo poner reclamaciones ni montar escándalos, simplemente no vuelvo más a ese sitio y aconsejo a mis amigos que tampoco vayan. Es una lástima, pero el señor fredo (que es superamable) está perdiendo clientes por no seleccionar mejor a la gente que contrata. Como si no hubiera profesionales de la hostelería en paro!!!