Acogedor, tranquilo, muy buen servicio, y la comida muy buena. Y el lugar donde esta situado muy bonito. Para recomendar y volver.
Todo fue perfecto, la comida muy bien y el servicio muy profesional. Es un restaurante donde uno se encuentra muy bien.
Carísimo... A 50 euros por barba, sin vino y sin postre... Me ha parecido muy caro. La calidad buena y el servicio atento aunque sobrepasado.
Magnífico restaurante, carta y servicio. No es un restaurante barato, pero la calidad merece la pena.
No les había llegado la reserva via internet, por lo que prefieren la reserva por teléfono, deberían coordinar las reservas, se corre el riesgo de ir y no poder comer.
me sorprendió el precio final pues siempre pensamos que en el que vemos en la carta esta incluido el IVA y te llevas la desagradable sorpresa de que no. Buena calidad, pero tanto el cordero como el cochinillo estaban pasados de sal. Ojalá que fuera una coincidencia, pues otras veces, hace ya tiempo, no fue así. No obstante volveré.
Impresionante restaurante. Trato agradable y calidad precio excelente. Muy buen ambiente, platos bien presentados y rapidez en el servicio.
Han dejado de dar al final de la comida las tejitas artesanales de almendras y las botellitas de licores.. Símbolo de Araceli! Pero todo sigue estando espectacular!
No nos gusto. Caro para lo que dan y servicio en plan manufactura en serie de botellas de plástico para que me entiendan.
Relación calidad precio muy mala, en realidad nos pareció un timo con los camareros corriendo de un lado para otro porque el sitio está lleno y como la gente paga, ellos encantados. No volveremos a un sitio con más fama que otra cosa.
El Caseron de Araceli, nos encanta, ya lo conocíamos, nos casamos en la finca Peñarrubia, sabemos que comer en cualquier Restaurante de Araceli es un éxito seguro. Pero en la comida de ayer si que pondría un pero... Las patatas fritas, no se pueden poner congeladas en un sitio así, con precios no asequibles para todo el mundo, por lo demás todo muy bien.
La comida es muy buena, no es un restaurante de los baratos, pero merece la pena por la calidad de la comida.
Lugar muy agradable. Personal de servicio muy simpático. Hemos muy bien comido y el servicio ha sido rápido (no había que esperar un montón entre los platos.
Darles la enhorabuena por la degustación que nos hicieron ayer para la boda de mi hijo. Los menús estuvieron muy exquisitos, cada cual mejor, muy bien servidos, el ambiente excelente, el trato también. La verdad que todo fue fenomenal, salimos muy contentos. Ojalá que el día 6 octubre salga igual de bien como ayer. Todos quedamos encantados. Gracias
No es la primera vez que íbamos. Como la mayoría de las veces el resultado ha sido satisfactorio. Si se puede, repetiremos.
Las mesas un poquito más separadas o si el restaurante está con pocos comensales ir colocándolos espaciados.
Es una verdadera lástima que te sirvan el cordero con patatas fritas que si no eran congeladas lo parecían. Creo que deberían servir unas ensaladas de lechuga, tomate y cebolla para acompañar el lechazo, o por el contrario unas patatas asadas al horno. Además creo que la carta es muy escasa.
Yo me casé en el 2007 y fue una boda estupenda, todo perfecto: el servicio, la comida, la ceremonia...
Me gustaría exponer mi decepción como clienta de hace muchos años respecto al servicio del día de navidad, la preparación de los menús en este día ha dejado bastante que desear y parecía más la típica comida que en un momento se prepara en una casa a la vista de comensales imprevistos en lugar de un restaurante en principio de calidad y sobre todo en relación a los precios. ¿como es posible por ejemplo que a un cordero asado(menú estrella del recinto) le acompañe un plato de patatas fritas aceitosas y contadas para varios, típico de un burger? En determinados revueltos solo aparecía prácticamente los huevos revueltos y el resto de ingredientes solo la esencia, etc..............
Los sitios estupendos y la comida muy buena, lo recomiendo, aunque he estado en alguna boda y, aunque el servicio era bueno, alguno de los camareros parecía que eran ellos los que estaban de boda, menuda menopea..., eran divertidos.
El restaurante araceli ha pasado a ser sombra de lo que fue. He visitado este restaurante varias veces durante los últimos diez años, celebré mi boda en uno de sus salones, y sin embargo ya casi nada me recuerda el esplendor de los pasados años. Su clientela decadente y malhumorada recuerda a la vieja aristocracia, la edad media ha pasado a superar la cincuentena. No es un lugar recomendable para ir con bebés o niños, no disponen de tronas lo que refuerza la tesis del selecto club de mayores, la altanería de los maitres no ayuda a sentirse cómodo salvo que seas conocido terrateniente de la zona. Por contra de lo que se pueda imaginar, la calidad de la comida no ha decaído, sin embargo sí se nota un leve descenso de la cantidad en los platos. Uno de los momentos más desconcertantes llega a la hora de saldar la cuenta, diez camareros mas tres maitres libres y un minuto de espera por cada uno de ellos para conseguir hacerte visible. Llama especialmente la atención las reverencias rodilla en tierra del personal en la despedida a la clientela habitual (pienso que tal cantidad desproporcianada de camareros debe seguir siendo rentable por esa veintena de clientes selectos y esos precios desorbitados e ignorantes de la crisis actual).
Pese a ser un sábado se nota la caída de clientela presente años atrás, más que la crisis (que en estos tiempos hace de araceli un restaurante poco competitivo y atractivo en la relación precio-calidad) la atención del personal no está a la altura de la estrella Michelin que tan orgullosamente muestran a la entrada al local.
Atención: 4 sobre 10
comida: 5 sobre 10
calidad: 6 sobre 10
precio: 4 sobre 10
puntuación: 4 sobre 10, apuesta arriesgada
Aunque respete tu opinión yo pienso todo lo contrario... Hay muy buen ambiente... Los comedores son acogedores y si es un lugar adecuado para los niños porque les hacen divertirse y si sienten bn acogidos. Respecto a los precios es normal... ¡es un restaurante de buena calidad! Y como comprenderás no te va a valer 2 euritos de nada... Atención 8 de 10
comida 9 de 10
calidad 8 de 10
precio 7 de 10
El restaurante Araceli ha pasado a ser sombra de lo que fue. He visitado este restaurante varias veces durante los últimos diez años, celebré mi boda en uno de sus salones, y sin embargo ya casi nada me recuerda el esplendor de los pasados años. Su clientela decadente y malhumorada recuerda a la vieja aristocracia, la edad media ha pasado a superar la cincuentena. No es un lugar recomendable para ir con bebés o niños, no disponen de tronas lo que refuerza la tesis del selecto club de mayores, la altanería de los maitres no ayuda a sentirse cómodo salvo que seas conocido terrateniente de la zona.
Por contra de lo que se pueda imaginar, la calidad de la comida no ha decaído, sin embargo sí se nota un leve descenso de la cantidad en los platos. Uno de los momentos más desconcertantes llega a la hora de saldar la cuenta, diez camareros mas tres maitres libres y un minuto de espera por cada uno de ellos para conseguir hacerte visible. Llama especialmente la atención las reverencias rodilla en tierra del personal en la despedida a la clientela habitual (pienso que tal cantidad desproporcianada de camareros debe seguir siendo rentable por esa veintena de clientes selectos y esos precios desorbitados e ignorantes de la crisis actual).
Pese a ser un sábado se nota la caída de clientela presente años atrás, más que la crisis (que en estos tiempos hace de araceli un restaurante poco competitivo y atractivo en la relación precio-calidad) la atención del personal no está a la altura de la estrella michelin que tan orgullosamente muestran a la entrada al local. Atención: 4 sobre 10
comida: 5 sobre 10
calidad: 6 sobre 10
precio: 4 sobre 10
puntuación: 4 sobre 10, apuesta arriesgada.
Estuvimos comiendo en una reunión de amigos y fue genial el trato y de comida abundante, estaban pendiente del menor detalle lo pasamos bien repetiremos.
Me lo recomendó un amigo y tengo que agradecerle el hecho, ya que es un sitio muy agradable con una comida muy buena, a unos precios aceptables, para una celebración especial, el trato me ha parecido muy cordial.