El caso es que reservé aquí por que las opiniones eran buenas y el precio que oscilan los platos no estaba mal, pues para mi opinión los platos son demasiado caros para ser una comida casera y tradicional, todo muy corriente, mi hijo pidió menú infantil el cual se componía de un platito pequeño muy de pasta, cinco albóndigas y una bola de helado, lo cual costó 13 euros, un menú turístico para otro de ellos con una ensalada básica y una porción de cochinillo con unas simples natillas, por 27 euros y un revuelto, unas judías y otra porción más de cochinillo por otro tanto, 92 euros el total, el caso, lo que pone el anunciante de menú entre 15 y 25 no es del todo cierto, claro que si contamos el de niños ahí esta la trampa. La atención del personal muy buena, la comida rica pero muy cara para lo básica que es, nada de excentricidades.