Restaurante: El Escondite (Alberto Alcocer)

La experiencia en el restaurante en el escondite no fue buena, no lo recomiendo. Había reservado a las 15. 30 h. Llegamos 2 de las 3 personas puntuales, pero una de ellas se retrasaba. Nos preguntaron que queríamos para beber, yo pedí cerveza sin alcohol con limón... El límón se quedó por el camino porque no lo trajerón. A las 15. 45 no había llegado la 3 persona aunque estaba de camino y ya nos habían preguntado en varias ocasiones si nos tomaban nota aunque sabían que éramos 3 a comer y nos sorprendieron con que "en 10 minutos cerramos la cocina". No imaginaba que en estas fechas navideñas, de comidas y celebraciones, en pleno pulmón del centro de negocios de Madrid, cerraban la cocina antes de las 4 de la tarde, con una reserva hecha a las 15. 30 h. Total que tuvimos que informar del menú por whatsapp a la persona que faltaba y que eligiera y pedir por ella antes de que llegara, aunque llegó a las 15. 55 h. Luego sólo 2 primeros y 2 segundos para el menú del día. De los primeros "el souquet de gambas" no era un souquet sino una crema y las gambas no eran gambas sino langostinos, menos mal que el camarero nos advirtió. De los segundos "los contramuslos de pollo con salsa chimichurri" el camarero también nos advirtió que no eran contramuslos sino que era pollo como empanado con salsa mahonesa, pero que a él le gustaba más así. Yo me pedí la lubina, pequeñina y más bien un poco sequilla. Parecía que tenían algo de prisa en quitar los platos, a simple vista no se veían más mesas ocupadas, aunque luego tuvimos que irles a buscar para pagar porque no había nadie para cobrar... Debían estar jugando al escondite. En fin, es uno de estos sitios a los que vas una vez y no vuelves y recomiendas a tus amig@s que no vayan.