Un lugar acogedor, con diferentes estilos zona chilaut, barra, salones acogedores y lo que no podre olvidar es ese cuarto del entero de cabrito lechal ummmmmm solo recordarlo. Les recomiendo el lugar. Además tienen un hinchable para que los niños se diviertan.
Lo que más me gustó que cuando hace buen tiempo tienen para los niños en la terraza un castillo hinchable y se lo pasan genial.
Visita obligatoria siempre que voy a villa del prado. Donde se come muy bien, trato amable, camaremos atentos, especialidad en cabrito asado criados por ellos y los calostros que me recuerda a mi niñez. Ambiente familiar, y en pareja.
Malo, malo y caro. Pedimos un menú de fiestas, a 22 € persona y estaba muy mal elaborado. Mi esposa pidió potaje de vigilia y le pusieron un potaje frio y sin bacalao y de segundo unos chipirones encebollados que estaban crudos y tuvo que devolverlos, cambiádselo por un filete lleno de nervios. Yo pedi un revuelto de boletus al Pedro Ximenez que tenía más cebolla que boletus y una pierna de cabrito, insulsa. Lo dicho mal servicio y caro para lo que ofrecen.
Estuve el pasado sábado 11 de mayo en una comunión y nos encantó el menú que nos sirvieron además pusieron un castillo hinchable y una animadora para los niños, lo que nos hizo disfrutar a los mayores también del evento.
Mis tíos son de villa del prado y quise reunir a mi madre con ellos y les junté para comer en este restaurante. A parte de ser un día muy especial para nosotros por lo que suponía, lo acompaño el buen trato que nos dieron y la buena comida que nos sirvieron. Sobretodo el cabrito ya que nos dijeron que tenían ganadería propia, y eso a la hora de comerlo se nota.
Unas instalaciones adecuadas al lugar y entorno, con una carta que gusta pero la relación calidad precio no es la que debería. Bien, pero caro.
Es estupendo, aquí me case yo y la verdad es que pasé un día muy agradable, esta escrito lo más sencillo es lo que más divierte. La comida es fabulosa y el ambiente lo mejor. Lo recomiendo.