Simplemente excepcional, como siempre el servicio y la comida son de lo mejor , el sitio acogedor, romántico, natural, para repetir siempre.
Simplemente excepcional, como siempre el servicio y la comida son de lo mejor , el sitio acogedor, romántico, natural, para repetir siempre.
Un restaurant familiar, bona cuina i servei. Tenen una terrassa molt agradable per prendre alguna copa i escoltar música
Comer a la carta está muy bien, pero el menú es horrible. Es un menú que en cualquier sitio vale 9-10 euros pero te lo sirven en platos más grandes y te cobran 25 euros. La verdad es que he ido varias veces a este restaurante y si comes a la carta los platos están muy bien, pero de menú ya es la 3ª vez que me defrauda muchísimo. El servicio y las instalaciones muy bien como siempre.
Comida y servicio muy correcto, el ambiente del restaurante recomendable para parejas. Realizan catas de vinos en la bodega
Me ha encantado poder ir a este restaurante! Fuimos de calçotada con unos amigos. El menú fue completísimo, pero lo mejor fue poder tomar el café en su terraza mientras los niños se lo pasaban bomba en su castillo inflable. Tranquilidad, buen servicio y un respiro para los papas-mamas.
Perfecto para familias con niños, porque tienen un espacio para jugar los peques mientras los padres podemos hacer el vermut o comer. Me gusta ¡¡¡
Cena con mi pareja la noche de San valentin, estuvimos muy bien y el servicio también. Tenían un menú confeccionado para este dia. Genial ¡¡¡¡volveremos
Buscábamos un restaurante con un menú precio -calidad correcto con las amigas y nos encontramos con un espacio muy guapo, con comedores privados, tranquilos y un servicio de 10, a final nos invitaron a unos chupitos en una zona de terraza cubierta donde tienes unos sillones y música, el menú completo 30€
El restaurante es bonito, pero al llegar nos dijeron que nos preparaban la mesa y cual fue nuestra sorpresa cuando un 18 de diciembre nos colocan en la terraza, aunque con una estufa; pero en la terraza. Lógicamente, ateridos de frío dijimos que allí hacía mucho frío y nos cambiaron a un salón en el que tenía una capacidad para unas 100 personas y estábamos solos. La verdad es que no entiendo que teniendo sitio vacío te lleven a la terraza y que la dueña te diga que es que estaban completos, por lo demás la comida estupenda y el trato del personal magnifico.
He estado en un par de ocasiones en este restaurante,la 1º fue una comida de empresa y todo muy correcto ,el trato y el menu.
En otra ocasión fui a cenar a la carta y fue excelente ,carta variada
y la verdad todo lo que comimos nos pareció exquisito .
Lo recomiendo.