Restaurante: El Porche

Si alguna vez pasas por ubeda (jaen) no se te ocurra entrar en este mal llamado restaurante porque seguro que sales cabreado y con hambre. Yo fui una noche de sábado junto a otras 7 personas mas. El sitio por fuera parece muy aparente y tranquilo y eso nos pareció bien y nos atrajo para entrar. Eran sobre las 8,30 de la tarde. Fuimos a sentarnos en unas mesas de un pequeño patio pero rapidamente salio un señor a preguntarnos que si íbamos a cenar de carta o a tapear. Le dijimos que a tapear, a lo que nos indicó que allí no podíamos entrar. Para las tapas las mesas del otro sitio. Nos sentamos y pedimos de beber. Nos trajeron la bebida y al poco rato unos aperitivos. Llega una señorita para tomarnos nota y cada uno le pide lo que quería cenar. El local se empezaba a llenar de gente. Incluso gente que llegó mucho después que nosotros eran atentidos antes. Preguntamos porque tarda tanto lo nuestro. No nos dicen nada. A la media hora nos dicen que parte de lo que hemos pedido no hay en cocina. Protestamos por el hecho de no haberlo dicho antes. Pedimos otras cosas. A la media hora volvemos a preguntar por qué no nos traen nada si están sirviendo a otras mesas que llegaron más tarde. Por fin nos traen algo pero resulta que no lo habíamos pedidos nosotros. Era para la mesa de al lado. Ya por fin traen algo y era lo que nos dijeron que no había, pero solo trajeron para varios. El resto a esperar su comida. Sorpresa general. Como 20 minutos más tarde nos traen una ración. De las otras dos se habían olvidado. Si después de todo esto osas entrar no se te ocurra pedir las croquetas. Ponte gafas para verlas. Frias y sin sabor a nada. Cuando ya estábamos hasta las narices pedimos la cuenta y exigimos que nos la trajera el encargado. Ese señor que tan amablemente nos indicó que nos sentaramos en otro sitio. Al cabo de los 20 minutos volvió la camarera con la cuenta. Seguramente el encargado estaba con un apretón. Solo puedo decir que por lo menos no nos provocaron una intoxicación.

Lugar con encanto, donde poder disfrutar d una velada entrañable y acogedora, por su decoración y su exquisita cocina y cuidada materia prima, resaltando sus exquisitos postres. Merece la pena descubrirlo. Gracias.

Lugar con encanto, donde poder disfrutar d una velada entrañable y acogedora, por su decoración y su exquisita cocina y cuidada materia prima, resaltando sus exquisitos postres. Merece la pena descubrirlo. Gracias.