opiniones sobre el Restaurante El Tizon

Me lo recomendaron y comimos 3 veces muy bien, nos quedamos en la parte de alante, osea en el bar, tiene comedor también, probamos diferente cosas, pescado, ensaladas fabes con almejas arroz caldoso y postres todo muy bueno, iría mañana mismo si no estuviera tan legos, la camarera aura, simpática y muy atenta.

Esta Semana Santa estuvimos 14 personas comiendo en el tizón (un menú ya reservado), comimos bien, el local es agradable y el servicio fue correcto; quizá la única pega que los manteles deberían renovarlos y los postres un pelín cargados de azúcar por lo demás, muy bien

Tiene dos zonas diferentes, para tapeo y restaurante. El tapeo esta muy bien. El restaurante, en mi opinión, es decepcionante. Muy recomendables la tortilla de la casa (una delicia), las carrilleras, los callos, las tostas. El servicio muy atento y profesional.

El tizón es el prototipo de restaurante que al pasar por delante de su puerta te invita a entrar. Las posibilidades que ofrece son muchas. Para tomar el menú la gente suele quedarse con el bar –es más barato- y para la carta con el comedor que tienen en la parte de atrás. Sus especialidades son el arroz y los bacalaos. Yo estuve hace un par de semanas. Éramos cuatro. De entrada nos pedimos: arroz con gambas y almejas –riquísimo- y de segundo dos comimos bacalaos y dos solomillo al foie. El bacalao os puedo asegurar que es el mejor que comí en mi vida… de postre un par de milhojas de escándalo, una botellita de vino rioja de la casa, agua y café. No me pareció caro para lo que comimos –calidad 100%- y el llenazo con el que salimos. Recomendable.

El tizón es el prototipo de restaurante que al pasar por delante de su puerta te invita a entrar. Las posibilidades que ofrece son muchas. Para tomar el menú la gente suele quedarse con el bar –es más barato- y para la carta con el comedor que tienen en la parte de atrás. Sus especialidades son el arroz y los bacalaos. Yo estuve hace un par de semanas. Éramos cuatro. De entrada nos pedimos: arroz con gambas y almejas –riquísimo- y de segundo dos comimos bacalaos y dos solomillo al foie. El bacalao os puedo asegurar que es el mejor que comí en mi vida… de postre un par de milhojas de escándalo, una botellita de vino rioja de la casa, agua y café. Pagamos a escote: 35 euros, no me pareció caro para lo que comimos –calidad 100%- y el llenazo con el que salimos. Recomendable.

Pues a mi me parece un restaurante a tener muy en cuenta en cuanto a calidad precio, sin aires de grandeza y con comida tradicional. Si es verdad que a veces toca esperar mesa porque tiene mucha afluencia, imposible de ir en días claves. La zona de barra está muy animada para vinos, pinchoteo y el menú (para mi) barato, a tener en cuenta que estas en el centro y que es muy variado, de echo como fuera por semana y voy con frecuencia a comer en la zona de bar que es mucho más barato que en el comedor, pero así lo indica en la carta de afuera, me imagino que será porque en el bar rotan más las mesas te ponen mantel de papel y estás más apretado. En cuanto a comer de restaurante suelo invitar a clientes y siempre quedo bien y no me meten los palos que meten por ahí.

Fatal. No lo recomiendo. Fuimos 5 personas, nada más sentarnos nos metieron la carta por el ojo y al decir que queríamos el ménú nos dejaron de lao. Vino el primero, pasable; llegó el 2º, patatas con congrio... Lamentable:no era fresco, sabía a harina y estaba blandurrio. Protestamos y nos dicen que sí, que el congrio les había salido 'aguarón'... Y aún así, sabiéndolo, nos lo sirven!!! Las 4 personas que lo pedimos lo devolvimos a cocina enterito. Nadie nos ofreció otra cosa y para colmo, después del postre pedimos café (fuera de menú) y ni siquiera tuvieron el detalle de no cobrárnoslos. Menú a 12 euros, para la m. Que fue, carísimo y encima mala atención y pésima calidad porque el producto no es fresco, digan lo que digan los de la cocina... Nunca más repetiremos.

Una carta medianamente buena, con gran parte de sus alimentos congelados o de baja calidad, sin mencionar el desorden que suelen tener casi siempre en el comedor por lo que pude ver los camareros y encargados cogen mesas según llegan sin dividir en rangos el salón, lo cual se traduce en un tiempo de espera de 10 minutos para recibir los entrantes y ya de levantar la mesa y comer el segundo plato me toco esperar casi media hora y no hablo de una sola vez si no de varias, sinceramente no pienso volver hasta que se modifique un poco creo que deberían de adaptarse a los nuevos tiempos y mejorar en su atención, hay muchos sitios competentes en Oviedo como para ser asiduo de uno por que tenga años en el negocio.

Recientemente cometí el error de ir a comer a este restaurante, y digo error porque el restaurante en sí deja bastante que desear. Engañan respecto al precio del menú, fuera del local te anuncian un precio concreto y cuando te pones a comerlo en el comedor es otro completamente distinto que tira a la alza y bastante a la alza y para colmo sin avisarte en ningún momento. Y si esto no fuese suficiente cuando se les acaba alguno de los platos que ofrecen en dicho menú te traen otro plato a su antojo sin consultártelo siquiera. Y lo mismo en cuanto al postre, te dan otro que no cumple las mismas condiciones que el ofertado, es decir de mucha menos calidad. Si el restaurante hace unos años tenía fama la va a empezar a perder rápidamente.

Bueno yo fui y a mi me encantó; es una belleza toda su cultura aunque la piscina es una maravilla y los señores que atienden el local son muy amables... Eso es todo espero que a ustedes le sirvan para ir ver toda esa maravilla.