Restaurante: Etxebertzeko Borda

Cervecita previa en su bonita terraza... Tratando de disfrutar del paisaje y vaya por dios... : un grupo de moteros se sentó al lado y nos estropeó el rato con sus alaridos. En fin. Entramos en el comedor, agradable, amplio, también con bonitas vistas. Nos explicaron que tienen menú a 34 euros (supusimos que era el de fin de semana) y como era bastante caro para nosotros, pedimos uno y aparte dos platos de la carta. Nos propusieron varios vinos y no conseguimos que nos aclarasen del todo si entraban o no en el menú. Parece que sí y que además puedes elegir entre algunos. Perfecto. Escogimos un tinto las campanas 2009 crianza, navarro. Afrutado, correcto. Lástima que nos lo sirvieron a demasíada temperatura (la de agosto... ). El entrante del menú fue una especie de paté con ensaladilla que resultó bueno. El segundo entrante unos “fritos” de croquetas, calamar y chistorra que encontramos muy, muy aceitosos. Correctos de sabor... Pero empalagosos por el aceite. El tercer plato del menú... Sus conocidas truchas con jamon, muy buenas. Tiernas y sabrosas. El siguiente plato fue cordero, bien hecho, tostado, bueno, sabroso. Nosotros añadimos a todo esto esos dos platos de la carta: un paté y un revuelto (que estaba bueno). Para cerrar el menú, un postre de degustación: con tarta de queso (intensa, sabrosa), flan (muy bueno), una especie de mus de limón (suave, bueno) y un helado de vainilla muy normal. Cerramos con dos cafés también buenos, con aroma. El servicio sin prisas, pero más o menos va sirviendo correctamente las mesas. En resumen, con algún plato mejorable y el vino caliente, pero comimos bastante bien en etxebertzeko borda, por 52 euros en total, bajando luego la comida con un paseo al precioso infernuko errota (molino del infierno) que cae cerca y vale la pena. Lástima que (otra vez, vaya por dios) un grupo de chillones que se bañaba bajo el mismo molino no nos dejó verlo tranquilamente...

Estuvimos el domingo 02 de febrero comiendo, y la verdad que nos encantó. Fuimos con unos amigos de Burgos, que por cierto le regalamos una morcilla para que la probasen. Comimos mu bien. Las alubias con morcilla..... Ricas, ricas, y las truchas con jamón... Espectaculares!!!! . Yo no soy mucho de truchas, pero estas tenían un sabor muy auténtico ( no a pescadería desde luego ). La cuajada y la tarta de queso caseras y muy buenas. Todo de cantidad muy bien. Ah, y el servicio, muy atentos con nosotros. El paisaje nos encantó y la excursión al molino... Imprescindible. Gracias y volveremos!!!!!

Todos los años nos juntamos los amigos para hacer una salida y conocer algún sitio nuevo. Este año hemos pensado en ir a conocer "infernuko errota" y ha sido un día muy bonito. Es verdad que cuesta un poco llegar hasta la zona, pero una vez allí, todo es maravilloso, desde el molino y el entorno, hasta la comida que nos ofrecieron y podimos degustar en "etxebertzeko borda". La atención que nos ofrecieron fue muy buena. Seguro que volveremos.

Somos una cuadrilla de amigos y todos los años, aprovechando la feria de elizondo, hacemos una escapada para pasar el dia. Esta vez hemos ido a comer al restaurante etxeberzeko y la impresión ha sido muy mala. De principio sacamos unos platos para compartir y de 2º un plato para cada: la txuleta del baztan nada, no había, solo de ternera, las palomas, duras, las truchas: de tamaño "pezqueñin". El precio para lo pedimos y sirvieron nos pareció muy caro. En fin no nos ha quedado ganas de volver ni de recomendar. Como positivo, el paisaje cuando tratas de llegar.

Muy recomendable, excelente producto casero, el solomillo, sus patatas y sus pimientos justifican el viaje, postres caseros fantásticos y trato amable y cercano.