Pesimo servicio y malísima calidad. La mesa que nos dieron en el centro de la sala para 7 personas era excesivamente grande y muy incomoda no podíamos hablar, incomodisimo alcanzar los platos. Se confundieron en 3 ocasiones en las bebidas que pedimos, 2 de los vinos que pedimos no los tenían, los entrantes muy escasos y calidad baja. Pero lo peor fue que tardaron 2 horas en servirnos arroz a banda y encima de pésima calidad: estaba seco, insipido y con gambas congeladas. Decepcionante para un restaurante de un hotel de 5 estrellas y nos quejamos de la situación y el metre no estuvo a la altura.