Ya lo conocía desde hace años, pero hacia tiempo que no iba. No me sorprendió porque siempre respondio a mis expectativas, de tal forma que hicimos el viaje desde Oviedo a San Sebastián con el fin de pasar dos días en esa maravillosa tierra y comer en la hermandad de pescadores. Recomiendo vivamente el excelente besugo, y el mero.... Maravillosos... El servicio muy educado y a la vez cariñoso y familiar... La bodega estupenda, y el precio de acorde con la comida y el servicio. Volveremos en cuanto podamos.