Restaurante: La Palmera

Yo ya fui dos años a sames y todos los días comía allí, comida excelente, trato excelente, el dueño me dio la mano sin conocernos de nada, estupendo sitio, lo recomiendo a tod@s l@s que estén por esa zona;y del cabritu ya ni hablar,verdaderamente suculento, estoy deseando volver a cangas aunque solo sea por ir al restaurante... Y quiero añadir que los que se quejan que los camareros son muy lentos les digo que será porque había mucha gente, así que paciencia y a deleitarse comiendo esos manjares.... Le mando un saludo al dueño que me dio la mano sin conocerme de nada, se ve que nos caímos bien....

Mi pareja y yo estábamos de vacaciones por la zona y cenamos allí el 23 de mayo, después de dar unas cuantas vueltas por sitios que no nos convencían. La verdad es que quedamos encantados. El servicio genial, super atento y muy simpático además de rápido (aunque es justo decir que aparte de nosotros sólo habían unos pocos clientes en la zona del bar). La comida, buenísima y en su punto: ella tomó entrecot y yo rodaballo al horno con una base de ajillo, superfresco y delicioso. Y como somos unos golosos, nos pedimos tres postres: el mejor el pastel de queso, pero la tarda de la abuela no le queda a la zaga. De hecho, todos los postres son caseros. Calidad/precio más que razonable. Si no viviéramos en Barcelona, nos convertiríamos en clientes habituales :-)

Todos los años voy con mi mujer para octubre a Mestas de Con unos cuantos días. Después de subir los Lagos en bici, recalamos a comer en La Palmera. Nos agrada mucho el trato, y me cae muy bien Jose Manuel. La carta, buena en general, aunque se hecha mucho de menos un revuelto que se hacia con espinacas fritas, gambas, y algo más que no recuerdo ahora, pero en general mi opinión es muy satisfactiria. Gracias, y si Dios quiere, el viernes 24 de octubre, comeremos allí.

El sábado diez de Marzo fuimos a Covadonga luego nos fuimos a comer a la Palmera. El camarero, si a eso se le puede llamar camarero, tardó mas de media hora en preguntarnos qué queríamos para comer. Pedimos una ensalada y unos escalopines al cabrales -que el Cabrales no era tal- luego esperar una hora para pedir postre, que el camarero no miraba para la mesa, tuvimos que salir al mostrador a pedir la cuenta. El dueño le pregunta al camarero si han tomado postre y va y le dice que no lo habíamos querido ¿a quien se lo pediamos? y era un sabado del mes de marzo. ¿Qué pasará en el verano?. Cuando era un restaurante de comida casera no pasaba eso, y esa fue nuestra experiencia en La Palmera de Soto de Cangas. Ah... por cierto: es muy caro. mas de 50 euros por 2 de escalopines al "cabrales", vino de la casa, pan y una ensalada de nuvel cuchin porque de Nouvelle cuisine no se puede llamar. Un beso.