Restaurante: Masia Gibert
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Calle Disseminats, 89 Palafolls, Barcelona 08389 Calle Disseminats, 89 Palafolls, Barcelona 08389 Calle Disseminats, 89
Palafolls, Barcelona 08389
España
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Instalaciones y servicios del Restaurante Masia Gibert
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local no fumadores
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masía o caserío
clasificación del Restaurante Masia Gibert
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No pienso volver y mucho menos recomendarlo. Celebramos un aniversario con 45 personas, el precio del menú era cerrado 18,50€. En principio iba a ser un primero, un segundo, bebida, pan y postres. Al llegar descubrimos que era un pica-pica y un único plato, hasta aquí todo "medio" bien. Nos traen el vino a la mesa (dos botellas para una mesa de 14 personas), la botella venía abierta i las etiquetas estaban empapadas de churretones de haberlas rellenado más de una vez, a eso súmale que el vino era imbebible. Después traen un sucedáneo de lo que alguna vez fue un intento de sangría (una sola sangría para la misma mesa de 14 personas) debería venir el mismo vino esta vez mezclado con agua y rodajas de naranja. Sólo nos trajeron pan una vez, al principio de la comida, el cual devoramos como lobos porque eran pasadas las tres y media de la tarde y aún no habíamos probado bocado. Y empieza el "surtido" de entrantes, debería poner comillas a todo pero lo voy a evitar para no hacerme pesada. Primero buñuelos de bacalao, alias buñuelos de viento, porque no sabían a nada. Segundo patatas bravas, inmasticables. Tercero croquetas, si era posible hacer unas croquetas malas desdeluego las hicieron, eran harina pura. Tercero, calamares a la romana, no sabía que unos calamares a la romana pudieran ser al vapor... Los deberían haber recalentado en el microondas y estaban sudados... Y por último, lo que yo he bautizado como las rabas popurrí!!! Un platito de rabas con todo lo que había sobrado de los primeros platos; las croquetas, los buñuelos y los calamares. Por si nos lo habíamos pensado y queríamos repetir. Quizás no les quedó claro que si los platos de pica-pica volvían llenos a la cocina a las 4 de la tarde, no es que no tuviéramos apetito, es que todo era incomible. I llegan los segundos, que en verdad eran los primeros porque aún no habíamos comido nada, pero ellos lo llaman así, debe ser para despistar... Yo particularmente pedí entrecot a la pimienta. No era entrecot, era un filete de medio centímetro lleno de vetas de grasa y nervios, le tuve que quitar la "corteza", como si fuera un pan bimbo, porque lo habían hecho tanto que no se podía mascar, tal cual lo mordí lo tuve que sacar de la boca. El chico que se sentaba a mi lado pidió pollo con escamarlanes. Al llegar, en vez de escamarlanes habían dos gambas diminutas, al menos la camarera, no se si por ser sincera o sarcástica dijo, bueno, los escamarlanes ahora son gambas. Gracias por avisar, no nos habíamos dado cuenta ¬¬. Al acabar todo esto, eran las 6 de la tarde, con solo cuatro míseros entrantes i un filete como un zapato. Gracias a dios, llega el pastel, que habíamos traído nosotros de una pastelería. Lo esperaba como agua de mayo ya que era lo único que no podía fallar. Pasado el pastel ni siquiera preguntaron si queríamos cafés, de hecho ya en el postre los camareros se esfumaron, cafés que aunque no entraban en el menú, ya que el postre nos lo habíamos traído nosotros podrían haber incluido. Y aunque nos los cobren, no tuvieron ni la dignidad de preguntar, simplemente desaparecieron para no volver. Ya eran las 6 de la tarde, y el show espectáculo que habíamos contratado para actuar después de la comida tubo que esperar una hora, habíamos pactado con el a las 5, suerte que no cobraba por horas... Sino hubiera salido por un pico. Pedimos cubatas o copas, mientras duraba el espectáculo, y cual fue nuestra sorpresa, que al amigo que fue a pedirlo lo hicieron cargar con una caja de plástico de recoger patatas llena de vasos de tubo llenos de telarañas, de polvo y de "grumitos" negros (si dijera asqueroso me quedaría corta) una botella de ginebra y una de tónica. Señores no pido ni fresas ni petunias ni cosas raras en mi ginebra pero como mínimo hielo y limón, ni siquiera eso. Pero la sorpresa más divertida es a la hora de pagar, ese menú "cerrado" de 18,50?? Pues al final pagamos 22,50 por cabeza. Si contamos la diferencia, sale a 4 euros por cabeza (por los "cubatas"), y si hacemos cálculos y multiplicamos 4 euros por 45 personas? La botella de ginebra y la de tónica nos sale a 180€. Ç genial señores, ni yo ni las 45 personas del cumpleaños pensamos volver jamás. Ni desde luego nadie que yo conozca o me pregunte.
Sentimos mucho que se fueran de nuestro restaurante con esa imagen. Por nuestra parte, comentar que les ofrecimos una de nuestras salas privadas, decorada por ustedes para la ocasión. También les preparamos una pantalla grande para proyectar un video y finalmente les pusimos a su disposición nuestros aparatos musicales. Así pues, intentamos que todo estuviera a vuestro gusto. En todos nuestros menús tienen la bebida incluida, así pués pueden repetir tantas veces como deseen. Aunque hayan dos botellas iniciales en la mesa, no deben preocuparse ya que solo tienen que pedir más al camarero. Igualmente con el pan. No tenemos constancia de la caja de vasos de tubo con polvo y "grumitos"; en cualquier caso no creo que pusieramos dichos vasos sin un lavado a fondo previo. Solo nos queda por decir que trabajamos día a día para mejorar todos nuestros platos y servicio. Concretamente, el domindo 27 de septiembre de 2015 (día de las elecciones al parlamento de catalunya), tuvimos un gran volumen de clientes. Hecho que pudo ocasionar ciertas negligencias en el servicio. Les invitamos a volver a nuestro restaurante para poder satisfacer sus expectativas y poder confiar en nosotros en otra ocasión.
Soc client habitual i en cap cas m´he trobat res del que diu aquest escrit, bona rel lació qualitat i preu i bon servei, mai m´he trobat mancança en les condicions higièniques. Els preus sempre s´han respectat segons el que diu la carta. Salutacions
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