Restaurante: Mesón Botes

He estado con mi familia en la Semana Santa del 2012, y no volveremos a este restaurante. entras pensando en comer menud del día a 10. - euros, pues así te lo anuncian en la entrada al local y en la propia carta de platos, pero cuando te sientas y vas a pedir nadie te dice que no todo lo que figura en la carta esta incluido en el meno del día. Por lo que pides en la creencia de que si lo esta. Cuál no sería nuestra sorpresa cuando al pedir, no una mariscada, ni mucho menos, sino uns simple ensalada mixta y un filete de emperador, al traerte la cuenta, te encuentras son el sorpresón de, sin nadie avisar antes, la ensalada mixta no entra en el menú de los 10,. Euros, pero la ensaladilla rusa (cuya materia pirma y mano de obra para su elaboración es más costosa) si entraba en el menu. Y lo mismo respecto del filete de emperador, que no entraba en el menú, pero si el filete de ternera. Pero las sorpresas no terminaron aquí: llega el turno del postre: la manzana y la torrija (postre especial), que se pidieron uno de mis hijos y mi marido y mi otro hijo, respectivamente, entraba dentro del precio de los 10,. Euros; pero, sin embargo, la manzana que yo pedí, idéntica a la de mi hijo, al haber considerado el camarero que mis otros platos (recuerdo, una simple ensalada y un filete de emperador), me cobró por la simple manzana la friolera de 2,50. - euros, es decir, casi 500 de las antiguas pesetas y el equivalente a prácticamente 2 kilos de manzanas en el mercado. Pero, no debo olvidarme de que te ponen pan absolutamente revenido y de dos semanas antes, que más que pan parece que estás comiendo chicle extralargo. Por último..... Has de comer como los pollos, porque si tardas más de lo que los camareros consideran, hacen amago de retirarte el plato y si protestas te dicen que te lo termines en la barra (fue el caso de los comensales de la mesa vecina a la nuestra), adonde has de acudir, igualmente, si quieres disfrutar del típico café o infusión de sobremesa..... El dinero es el dinero, y hay que rotar las mesas todo lo que se pueda, aún a riesgo de tratar espoleando al comensal anterior. En fin, un restaurante al que no volver nunca más y del que sales sintiéndote totalmente estafado. Deberían retirarlo de cualquier guía de restaurantes de cuenca.