Restaurante: Parador de Alcalá de Henares

Hemos estado varias veces porque nos gusta, os lo recomendamos si queréis disfrutar de la cocina cervantina en un ambiente super agradable, precio 26-35 y vale la pena, inmejorable atencion, parking, zona infantil y varios salones, suelen poner aperitivo antes de la comida, si vais, probar el guiso de las bodas de camacho y postre las costradas de alcala exquisitos.

Comida domingo día 9 de noviembre de 2014. Llegamos cinco personas al restaurante a la hora acordada, las 14,45 h. Estaba lleno, solo desocupadas dos mesas para dos personas que llegaran unos minutos después de nosotros. A partir de este momento todo mal, muy mal. Treinta minutos después de la llegada, el maitre tomó nota a las dos mesas que habían llegado después que nosotros. Nos tomaron nota a las tres y media. El maitre pidió dos veces perdón sin ninguna convicción. Los primeros platos llegaron hora y media desde que llegamos al restaurante. Uno de los segundos platos fue devuelto por mi mujer porque el pescado, bonito, estaba en mal estado. Se lo cambiaron por merluza. Lógicamente comió el plato sola, habíamos terminado hacía un buen rato. En general los platos "razonables", el precio por encima de la calidad que ofrecen y el servicio absolutamente penoso, lamentable. Obviamente no volveremos. En alcalá conocemos otros restaurantes: goya, cervantes y la cúpula, cuya relación calidad precio está por encima del restaurante del parador, totalmente prescindible.

He estado varias veces en el parador y siempre he salido satisfecho, con buena relación calidad/precio. El personal es amable, sobre todo en días laborales que suelen tener menos clientela. Las primeras veces nos ofrecían una bandeja de varios tipos de panes pero últimamente lo he echado en falta. Suelen poner un aperitivo antes de la comida, lo cual es de agradecer. Suelo elegir el menú donde te dan a elegir un primer plato y un segundo además de la carta de postres. La bebida no está incluida en el precio. El precio suele rondar los 35 euros por persona, algo que no me parece excesivamente caro para el sitio que es.

El sitio es muy bueno, como la mayoría de los paradores, la comida muy bien y tiene un fantástico patio/claustro para tomar una copita después de la cena.

Recomiendo este restaurante a todo el mundo. Hemos pasado una velada muy bonita además que era el día de San Valentín. El restaurante nos ha sorprendido con un menú exquisito especialmente hecho para este día.