Celebramos una comunión "doble", como ellos alegres nos dijeron, la de mis dos hijos. Desde que entramos con el picoteo y bolas para los peques, la comida -por cierto exquisita- y sus buenos vinos, hasta que salimos con payasos, baile y bebida para todos, el trato y la calidad fueron inigualables. Tienes todo en el mismos sitio, comida y entretenimiento para todas las edades y además nos felicitaron todos los familiares que compartieron ese día tan inolvidable y maravilloso con nosotros. Relación precio-calidad 9,9