Restaurante: Millor

Lo que molesta mucho es el olor a cocina y vaho que impregna la ropa del vapor y gases de las ollas, tienes que lavar todo lo que llevabas en esa comida. La solución podría ser barata. Está en cambiar los cristales altos de la cancela y vidrieras y poner lamas graduables en vez de los cristales altos. Así el vapor caliente se iría hacia arriba y la clientela no tendría frío

Buscábamos un menú para comer al mediodía un martes y nos decidimos por este local especializado en menús. Teníamos claro que íbamos a un sitio "de batalla" y nos iba bien, comeríamos rápido y bien. Pero nada más lejos de la realidad. Se habla del servicio rápido y del precio de 7,5 euros. Para empezar el menú cuesta 9,5 euros. Nosotros fuimos a las 2 y después de esperar 10 minutos sin que ni nos miraran, la camarera vino y  nos dijo que ya no había 2 de los primeros platos, 10 minutos después de haber pedido el segundo, la camarera volvió y nos dijo que no quedaba ni ese plato ni otros dos. Ya la gota que colmo el vaso fue cuando nos dijeron que no quedaba postre.... Realmente lo que más nos molestó no fue la mala previsión de comida, el caso es que todo nos lo dijeron de malas maneras y con actitud "si no te gusta ya sabes lo que hay". En resumen, que hay mil menús por 9,50 euros con mucho mejor servicio, calidad y previsión. No es normal que a las 14:00h. Los platos que hacen llamativo el menú (y los que les supone mayor coste) casualmente se hayan acabado, ofreciéndote como alternativa arroz milanesa y pechuga de pollo con huevo que valen 2 pesetas. Mi recomendación es que busquéis cualquier otro porque este no vale nada. Un saludo