opiniones sobre el Restaurante Puertas

Deprimente!! Despedida de soltero... Vaya asko!! Jamas entréis a ese restaurante, comida pésima el solomillo andaba solo encima del plato(malísimo) y resto de la comida fria y mala. Pero lo peor el trato que tiene el dueño con sus empleados grita y discute un trato malísimo. La música una minicadena con dos altavoces pequeños dios mio. El que nos organizo la despedida un comercial llamado joaquin, prometio: nos recogeria un autobus con espectáculo, nos dejaria en el restaurante puertas cena y striptise, después entrada gratis en el kudeta, con copas y demás bien pues nada!!! De esto lo ha cumplido el tal joakin. Nunca volveremos a cenar en ese restaurante y escribimos para avisar a la gente para que restaurantes como ese no esten funcionando en santander.

Hemos ido a celebrar una despedida y nos ha decepcionado la mala calidad del servicio en múltiples aspectos: la comida pésima, servida a destiempo, la bebida insuficiente, pago anticipado del servicio, mala atención, el local es muy pequeño, las mesas estaban sin asignar, se nos indicó que el espectáculo acabaría a las 02:00 y finalizó a las 00:00, cuando quisimos exponer de forma educada y con talante negociador nuestra opinión, se nos increpó y se hizo caso omiso, intentando evitar que se difundiera nuestra valoración, subiendo incluso el volumen de la música... En conclusión, la opinión generalizada de los grupos que asistimos es desaconsejaros asistir...

Horrible!!! He venido a santander con unos amigos a disfrutar de la región y me han hecho un flaco favor recomendándome este lugar. La comida ha sido mala en calidad y en cantidad, demasiado caro por un producto de sabor que deja bastante que desear. En cuanto al trato recibido lo calificaría como desagradable. Un sitio al que se que no debo volver.

Bueno no recuerdo jamas en la vida haber comido tan mal en un restaurante. La comida es la peor comida que he comido en mi vida el servicio lo más penoso que jamas he conocido. Todo sabia aceite malo encima la sangría de cartón, una hora entre los entrantes y el postre. Pero lo peor de todo ya fue la tarda no se puedo comprar un bizcocho ya echo rellenarle de pena por cierto y encima hacer que la anfitriona de la despedida sirva la tarta a todos los demás mientras el camarero mira. Y jamas vi tener que servirnos los cafés entre nosotras. Y no se era porque tuvieran mucho trabajo porque el restaurante estaba vacío, ahora entiendo el porque estaba vacío, porque jamas le diré a nadie que valla a comer a ese restaurante. Por dios que asco de comida¡¡¡¡¡¡. Encima obligatorio darles una estrella pero sino se merece ni una este restaurante¡¡

¡¡ojo!! En este restaurante cometimos el error de entrar. No tiene el menú a la vista (primer error). Entramos y como nos vio de fuera o bien que no eramos conocidos nos ofreció unos platos diferentes. En nuestro caso eludo ofrecernos de primero la ensalada. A unas personas que estaban cerca, conocidos, les ofreció dos platos más (aparte de la ensalada) el menú no valía nada.. Los espaguetis como harina. Para la siguiente vez que vayamos a Santander ya sabemos.

Cuidado!!! La apariencia es buena pero la sorpresa te la llevas cuando vas a pagar, cariiisimo para lo que es, el menú no esta especificado, te leen los primeros y segundos pero después que lo pediste y lo comiste te enteras que no tiene nada incluido, ni agua ni vino ni postre ni nada y ahí es donde te dan un buen palo. El vino no solo lo cobran aparte sino que ademas carísimo como si fuera bueno, que no lo es. Lo peor de todo fue que al reclamar por lo que nos habían cobrado en una factura que encima no estaba detallada, solo decía "4 comidas"nos encontramos con que el encargado o dueño es un señor sin ninguna educación y con una tremenda falta de respeto a los clientes y en especial a las mujeres, su actitud fue absolutamente desagradable y pretendiendo que la persona que reclamaba se callara la boca, claro, era una mujer y por lo visto eso a el no le merece ningún respeto. De lo más bajo, para no pisar ese lugar nunca más y avisar a los amigos que no se les ocurra pasar por ahí.

El peor restaurante que he estado en mi vida. Una carta carisima para la calidad y cantidad. Un servicio penoso, les dices que te den otro entrecot que ese esta quemao y te saltan con que no tienen mas, que es un mal día. No os paséis bebiendo un triste "lambrusco" porque la botella te cuesta 10 €. No lo recomiendo para nada!!!