Restaurante: a Vila

Mi opinión sobre este sitio es pésima, no entiendo como un sitio así puede estar abierto. Fui de comida de negocios con un compañero y fatal desde las croquetas que nos pusieron congeladas, pasando por pollo poco hecho y duro como la suela de un zapato, las patatas muy aceitosas y por sí fuera poco crudas y el postre que daba pena verlo, una supuesta tarta casera, que más que tarta parecía un vómito marrón, inclasificable, lo mejor de todo el servicio, sin lugar a dudas.

Este año me llevé a mis suegros y a mi mujer a comer a este restaurante. Para empezar para la gente que había me tardaron muchísimo en darme mesa. Pedimos unos callos que no sabían a nada, los chocos tenían arenas y los pescaditos estaban todos engrasados. A la hora de pedir el vino no tenían una gran carta y los que tenían no estaban a la temperatura adecuada y no tenían copas para el vino. El postre fue de risa me trajeron una contessa que se debió cortar el cocinero de los estrechito que era el trozo y aún encima me cobraron 3 euros por él. Quedamos tan hartos que reclamé hablar con el encargado y le dí todas mis quejas diciéndole que no volvería. En serio no lo recomiendo, los hay en Arbo mucho mejores.