Realizamos nuestra boda el 13 junio de 2015, y salió todo a perfecto. 3 años después, nuestras amistades todavía nos dan las gracias por la excelente comida y la emotiva ceremonia. Ese día nos dejamos guiar por azucena y no nos tuvimos que preocupar de nada más, ya que todo lo programado lo cumplió a pie de letra. Sin duda, el mejor día de nuestras vidas. Desde entonces repetimos todos los veranos en sus cenas de agosto, donde prueban nuevos menús (buenísimos) y además, han reformado el salón, y está precioso.