Fuimos un grupo de amigos. El precio fue muy económico, creo que reservando con antelación te hacen menús especiales baratos y además de cenar bien, con tapas, bebimos toda la sangría de sidra que quisimos y no nos metieron prisa para marchar. Los postres son de lo mejor que hay en la ciudad. La única pega es que no es céntrico, pero entre varios un taxi hasta el centro de Gijón no es caro. Para repetir!!