La verdad que cenamos genial, la atención muy buena, el servicio rápido y el entorno fantástico. El precio es elevado pero compensa por la atención, la calidad y originalidad de la comida. Recomendable.
La verdad que cenamos genial, la atención muy buena, el servicio rápido y el entorno fantástico. El precio es elevado pero compensa por la atención, la calidad y originalidad de la comida. Recomendable.
Todo genial! Quizá un poco caro, pero el servicio, instalaciones, comida, todo muy bueno!!!! Repetimos seguro
Celebré mi boda y fue genial. Todos los detalles el servicios, la comida, la atencion... Todo perfecto y el director Fernando, agradable, atento a todo. La verdad que recomiendo el restaurante, tiene calidas y precios asequibles.
Estuve allí el año pasado y todo fue de correcto el trato y la calidad de la comida buena no tengo ninguna queja cambiaron de dueños y de nombre no lo sabia me decepcione al enterarme pero el servicio estuvo correcto la comida muy buena volveré a repetir estuve muy a gusto y mi mujer también
El volumen está demasiado alto y no puedes hablar con tu acompañante, es muy molesto. Por todo lo demás muy bien, aunque se agradecería un poco más de tranquilidad. Muy bien situado.
Quiero y no puedo. Y lo digo porque he probado en dos ocasiones. Como dice la opinión anterior, (que claramente la hizo uno de los propietarios), el sitio está en un espacio excepcional. La decoración es curiosa y joven y la carta es interesante... Todo hace preveer una feliz velada. Además, por la decoración y los relaciones públicas el ambiente las promete... La primera vez tardaron 3 horas en servirnos la cena. Increíble!!! Los camareros se esforzaban por dar vueltas con las manos vacías porque de la cocina no salia un plato. La mesa del lado, con 4 personas, abandonó la sala sin pagar. Nosotros queríamos hacer lo mismo. Se excusaron no se cuantas veces alegando que eran nuevos. Desde luego lo parecían. La segunda oportunidad ha sido peor. De nuevo los relaciones públicas en la entrada y espectáculo flamenco incorporado.. De nuevo promete. Las música se convirtió en ruido insoportable por lo alto. El espacio diáfano hacia reverberación y era imposible conversar entre los de la propia mesa. De la carta no lo tiene todo y te traen otra cosa similar con la excusa del error, " si no le gusta se lo cambio" hasta en tres ocasiones. Como tardaban unos 15 minutos entre plato y plato no lo rechazabas para no quedarte sin comer. Al final pasamos de los postres y de los cafés y probamos en otro sitio. Aun estuvimos de suerte porque de nuevo varias parejas de otras mesas se fueron sin comer. Felicidades... Por no volvernos a ver
Mi experiencia ha sido muy grata en este restaurante. Me decidí porque me habían hablado de él y había visto fotos. Creo que estar en él ha estado mucho mejor. El interior tiene un toque extraño y moderno: paredes de color blanco con forma cuneiforme pero con decoración modernista muy bien conseguida. Llegas y te atiende el maître (curioso su nombre “yoyo”) muy amable. Me invita a sentarme en la terraza o en el interior. Escogí la terraza porque hacía un sol precioso. En la terraza tienen una zona a la derecha donde esta cubierta de un toldo de madera, con cortinas de color lila y blanco que les da un toque muy ameno. Luego en la parte de en medio, son mesas con sombrillas de color crema grandes. Donde me senté yo, en la zona de abajo hay unos sofás, justo delante del mar. Estos son los momentos que agradezco de la vida…poder escuchar el romper de las olas (y encima sin tener que estar sobre la arena) sentado en un sofá cómodo tomando un refresco, picando algo salado y leyendo el periódico. Abrumante. Todo esto gracias al maître que me ofreció esta posibilidad mientras me preparaban la comida. Después de 15 min. Disfrutando del calor que da el sol, me invitan a poderme sentar en mi mesa (mesa simple, cuadrada con un mantel con adornos simples. Cubertería igual) de primero calamares: plato rectangular negro, bien limpio, los calamares sin derramar aceite. El arroz negro muy bueno. Bien presentado. Puntos buenos: servicio rápido, agradable y atento. Puntos malos: el viento