Sitio verdaderamente especial. Se pidió ventanal y aunque nos dijeron que harían lo posible las mesas para dos personas están en pared y ahí nos toco estando los ventanas durante la hora que duró nuestra comida en algunas mesas vacías. La atención excepcional, los camareros amabilisimos y atentos, un 10. Falta una carta más extensa, no queríamos el mes especial y la carta constaba de muy pocos platos, 6 creo recordar y vas cogiendo por eliminación. Las cantidades pequeñas relación precio. Lo que más me ha gustado el sitio y la atención.