Decoración preciosa, atención perfecta todo delicioso y calidad precio, correcta. Del todo aconsejable.
Decoración preciosa, atención perfecta todo delicioso y calidad precio, correcta. Del todo aconsejable.
Calidad y profesionalidad tanto de servicio como de cocina. Diseño bonito y con mucho gusto del local.
Nos encantó a todos, la comida, el trato y la rapidez. Venimos en primavera y verano a torrelavega, pero cuando vayamos a pasar el día a santander ya sabemos donde iremos a comer, aúnque tengo que decir que si bajaran algo los precios acudiríamos más asiduamente
Un lugar acogedor, con historia, céntrico. El trato, el servicio inmejorable. Comimos muy bien. La carta amplia y con detalles imaginativos. Me encantò
Las materias primas son de muy buena calidad, todo fresco y natural. Las raciones son muy adecuadas en cantidad y buena presentación. La merluza que se comió mi hijo era de una calidad extraordinaria, he comido en centenares de restaurantes y se diferenciar lo bueno de lo extraordinario. La brocheta de rape, el tomate natural pelado y el arroz que nos comimos muy muy bueno. El servicio muy atento y agradable, solo un pero al pedir unas patatas fritas que vi en la barra para mi hijo de 5 años y que no se molestaron mucho en subir. Luego quedó en anécdota porque se lo pedí a otra camarera y 0 problemas. Suvieron la comida a su tiempo. El ambiente que se respiraba era muy agradable y tranquilo. Restaurante bien decorado. Los baños son para los clicks de famobil, extremadamente reducidos en su tamaño y algo descuidados. Para repetir si porque me quedé con ganas de probar muchas cosas ricas que tienen en su carta.
Tanto el trato, como la comida, como el precio son excelentes, la verdad que nos ha encantado super recomendable y para volver a repetir. Si váis a Santander no os valláis sin comer aki esta genial. Nosotros comimos media ración de rabas, media ración de anchoas con queso y arroz caldoso, era para dos y hemos tenido más que de sobra y el precio 42€ con café y bebida incluida. Estupendisismoooooooo
Cenamos de maravilla, los arroces son fantásticos y el pescado también. No había probado el martin, muy sabroso. Picoteamos pulpo que no era muy allá y las rabas que bueno, siempre están bien, riquísimas las croquetas. El servicio estuvo muy atento en todo momento. Los postres divinos. Seguro que repetiremos.
La valoración del restaurante es regular tirando a bueno, tuvimos un percance con la comida, y la verdad es que portaron muy bien, no cobrándonos algún plato que habíamos elegido, y que no pudimos comernos porque se habían pasado en los condimentos.
Somos jovenes y nos gusta disfrutar de la buena mesa, si puede ser ademas sin castigar el bolsillo más de lo necesario, mejor cenar en el machi fue un placer, los camareros atentos, el entorno muy agradable, mejor en el segundo piso viendo piedra y madera con mucha historia. Comienza la fiesta con con unas anchoas exquisitas, mejor con queso pues así las tomas diferentes, las rabas de aquellas que invitan a tu memoria a recordar las de tu madre, mejilones al vapor y el pastel de cabracho con un toque muy especial. El camarero nos cayo bien desde el principio cuando nos dijo " mucha comida, os saco medias raciones". Tenia toda la razón pero aun así y tras terminar cerramos con una necoritas. Lo dicho, una fiesta de comida sencilla pero de la buena y pagamos 60 euros con unas cañas
Mi opinión es muy positiva. Precisamente ayer, lunes 14 de marzo, salió por tv como preparaban los platos de calamares. Muchos años hace que allí tomo el aperitivo cuando voy a Santander, una ciudad preciosa. El boca a boca, es su mejor propaganda. Es céntrico y los camareros son buena gente aunque algo serios con los forasteros. Como años anteriores, del 2 al 6 de noviembre me acercaré ahí y podré decirles que fuí el primero en opinar del machi. Mis suegros, naturales de ahí (familia de los torriente) me enseñaron una buena gente, una hermosa ciudad y una provincia de las más bellas de España. ¿qué más puede pedirse? Un abrazo para todos los que lean estas líneas. Para el restaurante, lo mejor que son sus clientes.