Evitar a toda costa. Cometí el error de contratar un almuerzo para un grupo de personas porque el precio parecía razonable y la localización me venía muy bien, pero la cosa no pudo ir peor. El menú contratado de ensalada o gazpacho y pescaíto frito acabo siendo una miserable ensalada de lechuga con algo de lombarda y maíz. Escasa y vinagrosa. No hubo opción de gazpacho. En cuanto a pescaíto frito resultó muy escaso (1 gamba frita, 4 boquerones pequeños, 4 piezas de calamar, otros 4 trocitos de pescado sin identificar pero poco fresco y un puñadito de sucedáneo de chanquete). Pero lo peor es que en un plato vino con 'sorpresa' en forma de insecto (una especie de tijereta) también rebozadito y frito. Cuando se lo hicimos notar al camarero vino el maitre y lo único que se le ocurrió ofrecer fue cambiar el plato por otro nuevo, algo que por supuesto la persona afectada rechazó porque no quería seguir comiendo. En realidad, la comida acabó ahí para la mitad de los comensales en esa mesa. Ni siquiera tuvieron el detalle de descontar ese almuerzo de la factura final. O sea, a la pésima comida hubo que añadir un pésimo servicio. Lo dicho, un lugar para evitar a toda costa.