Con ana sigue sendo excelente, para repetir salpicon, mariscos, pescados, arroz caldoso con vogavante,... Especialmente recomendable.
Con ana sigue sendo excelente, para repetir salpicon, mariscos, pescados, arroz caldoso con vogavante,... Especialmente recomendable.
Lo de las raciones es sino escaso más bien diría yo de risa, me recuerdan a otro restaurante en la Coruña (pablo gallego). Y eso que me lo recomendaron muchisimo, el propietario alfredo, como que muy poco profesional sobre todo al rechazarle el albariño casero que nos quería endosar , no pega la decoración con la atención para nada. Y los precios son realmente exagerados para la cantidad que se sirve en el plato, no merece la pena desplazarse a 100 kms. Para llevar semejante decepcion.
La calidad de los productos es buena. Las raciones muy muy muy escasas, en la mesa llegamos a bromear con "mimimalismo gastronómico". Las instalaciones agradables y cómodas. Los precios desproporcionados a lo que te comes, y sobre todo desproporcionados al desagradable servicio que te dan. No basta con "tirar" la comida ante los comensales, si te piden que no hables gallego porque hay 2 personas que no lo entienden correctamente, puedes hablar castellano por unos minutos: eu son da terra, e non pasa nada por falar castelán uns minutos cando cho piden. Por cierto, un pescado en caldeirada no es un pescado a la gallega, la preparación es otra. Espero que mejoren en la atención, al final, el precio y la escasez terminas olvidándolo, pero una mala atención no.
Un producto de una calidad inmejorable, perfectamente cocinado y presentado, la bodega o al menos lo que bebimos difícilmente memorable, y una atención de amigo, con estas premisas el precio es lo de menos. Recomendable si quieres comer excelentemente y no tienes que pensar en la cartera.
Esta clasificado como marisquería pero en realidad tiene 4 platos de y carísimos... El empleado que nos ha atendido era bastante antipático.
Estivemos ceando 4 persoas. A comida francamente boa, o material de primeira, é un dos poucos sitios onde podes comer marisco e peixe de verdade. Íbamos sobre seguro porque tiñamos as referencias dun amigo, e tampouco nos sorprendimos dos precios: se o salpicón de langosta que nos tomamos chega a ser barato xa sería de nota! Se pasades pola zona, e para os que gostamos do bo produto sen aditivos nen colorantes, totalmente recomendable.
Lo visitamos este verano. Los productos son de primera calidad. La preparación y presentación buenas. Los sabores realmente agradables y muy gustosos. El comedor muy coqueto por su tamaño y muy confortable. Fuimos séis personas. El precio medio de nuestro cubierto fue de 49 euros persona, con algo de marisco y pescados en nuestro menú, poco vino(1) y aguas(2) y postres(4) y cafés(3). Cuando entramos sabíamos que íbamos a pagar por encima de 50 euros por persona, así que no nos cogió por sorpresa. A nuestro entender las raciones son escasas (con los pescados y el salpicón), pero cuando ves la carta no lo sabes, pues solo ves los precios que estás dispuesto a pagar. El desengaño se produce cuando recordando los precios ves la ración que te ponen delante, muy muy escasa para esos precios. El día de nuestra visita había comiendo 43 personas, repartidas en 14 mesas, y solo una persona para atenderlas, hacía todo lo que podía y con trato esmerado y agradable, pero era pco personal. No tuvieron la cortesía de invitar ni a los 3 cafés (de pota) que se tomaron en la mesa. En fin, todo muy rico y delicioso, pero escaso y cicatero.
Fuimos este verano por casualidad, y comimos increíblemente bien, el marisco de primera calidad, y el dueño muy majo y amable. disfrutamos muchísimo, sobretodo con las zamburiñas... qué buenas!!
Os recomiendo pasar la mañana en la playa de laxe (preciosa, arena blanca y aguas cristalinas, pero muy fría, jeje ) y luego pegaros la gran mariscada en este restaurante.