opiniones sobre el Restaurante Asador de Carmen

Una verdadera vergüenza, comida pasada y de mala calidad, ahí un camarero pelirojo que ni se entera y pasa de todo, el postre mejor ni hablar de ello, salimos muy decepcionados, no os aconsejo para nada este cuchitril

Que razón tienen las valoraciones de tripadvisor. Sitio más que recomendable si te gustan las emociones fuertes. Empezamos, al pedir la bebida del menú el agua es del frigo en una jarra y el vino lo traen también en una jarra y más malo que la quina, primeros espaguetis aguados y platos de cuchara grasientos, de segundo guisos también grasientos y con 3 trozos de carne. El plato fuerte es cuando pides un codillo y esta seco por fuera y congelado por dentro y el entrecot tiene un tufo que más que estar en un plato tendria que estar en la basura. Se le comenta al responsable y se desentiende por completo. Una experiencia inolvidable, gracias por arruinar una comida familiar.

Restaurante caro y un servicio pésimo. Camareros de edad que nos preguntaron varias veces que habíamos pedido y aún así nos trajeron platos que no eran nuestros. Además de una larga espera entre plato y plato. La comida no está mal pero desde luego no pagas lo que comes. Desaconsejado.

Comimos una ensalada y judiones con matanza, caros pero buenos. Lo que nos sorprendió en el sentido negativo es que cobran 3,90 por el pan (un pan corriente) y 2,95 euros por copa de vino de la casa. En total 58 euros. Demasiado caro para lo que recibimos. No volvemos ni lo recomendamos.

Eramos 5 adultos y 2 niños, el sitio bien ubicado con una terraza que es lo mejor que tiene, el servicio agradable pero la comida pésima:las croquetas pasables, los chipirones encebollados incomibles, los callos con una salsa harinosa que parecía una pasta, los judiones con matanza igual como una pasta, la chuletas de lechal nada y el pan de pueblo para nada es un pan de barra de los que llaman de leña normalito, lo mejor la cerveza y el vino. En resumen el que busque buena calidad y buena cocina que no aparezca por allí

No repetiremos, a una de las personas no les gustaba uno de los platos y no se lo cambiaron, la carne estaba dura, la tarta de queso parecía un sobao. Muy caro 22 euros de menú para la calidad de la comida.

Hemos venido con la ilusión de tomar un cocido y nos hemos encontrado con una sopa marron con sabor a starlux, unos garbanzos duros.... En fin nada recomendable. Lo siento mucho porque las camareras han sido amables

No recomiendo este asador. Días después de navidad me acerqué a comer y pedimos cyuarto de cochinillo para dos. Al ver el precio y el lugar supusimos que sería la comida buena. Nada más lejos de la realidad cuando llegó el cochinillo asado. No sabemos si estaba recalentado de lo que había sobrado de navidad o qué ocurría, pero el cochinillo ni tenía la piel crujiente, ni la carne estaba jugosa, ni tenía buen sabor. Protestamos a los camareros, que fueron amables y simpáticos dentro de un límite, y el cocinero, que no se interesó por conocer nuestro problema ni se acercó a nosotros, tuvo la poca vergüenza de vernos y esconderse para que no le reprocháramos el plato servido. Nos cobraron todo íntegramente sin descontar nada. No volveré a este restaurante y espero que ustedes tampocco lo hagan. Así se ganan estos señores a sus clientes, mala calidad a precios altos. Señores, no somos tontos.

No vayan a este restaurante. Como dato les digo que pagamos 100 por una comida para dos sin vino, ni postres, y si la calidad hubiese sido de primera habría tenido un pase, pero la carne de buey que pedimos parecían filetes de ternera de mala calidad con mucho nervio y duros. Tiene también gracia que por persona cobran 1,8€ por el pan, que lo sirven en una cesta y no dejan de ser rebanadas de una barra, al igual que los 3€ por una botella de agua o los 12€ por una ensalada, Todavía alucino.... Y lo mejor es que a todo esto tenemos que sumarle el IVA correspondiente, ya que no lo tienen incluido en la carta. En mi opinión esta ultima practica dice mucho de un restaurante. Por último deciros que la atención muy normalita, como en cualquier sitio de menú.

Acudí a este restaurante con mis padres en una comida familiar presumen de asador y de horno de leña pero los asados son más bien cocidos. Pedimos tostón y cordero y una ensalada mixta para compartir, la ensalada era corriente, en cuanto a las carnes la salsa que llevan uno y otro plato es la misma, agua sal y limón, no tenía gracia aparente, las patatas estaban crudas e insípidas. Recomendaría cualquier otro sitio para comer ya que la comida a la carta oscila sobre unos 25-35€ por persona. También he de añadir una aptitud negativa por una de las camareras, en uno de sus momentos de estar parada entre el servicio, se puso a fumar a la puerta del establecimiento delante nuestro.

He ido a comer al asador de carmen con mi madre y su pareja, y los tres pedimos el menú diario que, aunque dice que cuesta 15€ o menos, nos costó a cada uno 22€ ( un total de 66€). Yo hablo de la "pasta a la boloñesa" que me comí, si es que se le podía llamar pasta. Estaba súper seca . El jamón cocido como segundo plato me llenó de nauseas con sólo olerlo. Ahh bueno, mi coca-cola estaba muy buena, ¡eso sí!. La sandía que me comí estaba dulce pero con algunas partes viejas, y el bacalao que se pidió mi madre tenía una salsa de muy mal sabor y una patata en medio del plato recalentada del día anterior, sin embargo su coca-cola también estaba muy buena. Sinceramente creo que me estafaron porque la relación calidad precio era pésima. ( no sé como no me fui haciendo un sinpa [sinpagar]). Me cuesta creer que este "restaurante" tenga tan buena crítica con el mal rato que pasamos.

Un sitio maravilloso, fuimos 10 personas, el trato fue excelente la comida casera y muy buena, tienen un menú de fin de semana de 22€ muy completo y abundante. En dos semanas repetiremos ya que nos encanto la experiencia, muy muy recomendable.

Buenisimo! Muy recomendable, la comida muy rica y las raciones grandes, de precio normal.. La terraza es preciosa y el sitio muy acogedor, nos trataron genial! Sin duda que repetiremos!

La verdad es que el sitio es rebuscado, su entrada parece el acceso del servicio, pero una vez dentro tiene un patio excelente, que como terraza debe de ser un lujo en tiempo cálido. El interior, igualmente engaña un poco al comienzo y sorprende después, como a mí el ver ese estilo de casa antigua adaptada para la restauración, que me encantó. Al haber pocos comensales, habían grandes áreas sin iluminación que no restaba encanto a la estancia. El servicio muy agradable, personal muy atento y dispuesto, todo sea igualmente por que éramos pocos comensales, lo cual no permite hacer una valoración objetiva. La comida, siento deciros que me ha decepcionado. Judiones de la granja con un caldo semejante al pudin, con grandes trozos de carne que no daban más que reparo empezar a comer. Filete crudo, cuando de antemano se sugirió estuviera "hecho". Para picar, un entrante (sin pedirlo) de garbanzos con asadurilla... Bueno, es que ninguno nos gusta el sabor de la asadura, así pues me reservo el comentario. Nos lo cambiaron sin problemas, cuando le dijimos que no nos gustaba. El precio de 35,2 € por persona, teniendo en cuenta que sólo 2 de los 5 comensales pidieron primero y segundo plato, es el más alto que he pagado en mis salidas fin de semana, y les aseguro que llevo unas pocas. Siento deciros que en mi opinión, no es un lugar para degustar, ni para aquellos que busquen algo económico, todos los platos (salvo uno de verduras) superaban los 12 €. Pero si queréis un lugar privilegiado en la zona, no está mal, aunque no esperéis ver desde allí el embalse. Si váis a tomaros sólo unas cañas en la terraza también, puede que no esté mal en época más cálida, aunque esperando que las tapas sean algo más imaginativas. Más de eso yo no os lo aconsejo.

Ciertamente lamentable. La comida deja mucho que desear, la atención pésima. Más de una hora esperando entre el primero y el segundo plato. Para finalizar, nos incluyeron en la cuenta un plato que no habíamos pedido y al decírselo al camarero se enfrentó a nosotros de muy malos modales negándonos la razón. En definitiva, si vais a manzanares el real y veis este restaurante, salid corriendo en dirección contraria. Un bocadillo será mejor elección.

El trato estupendo! Y la comida riquísima y abundante, el lugar es precioso, pensamos todos en repetir y muy pronto, os lo recomiendo a todos

A finales de septiembre, fuimos con unos amigos a ver el castillo de manzanares así como la pedriza, fuimos a comer al asador de carmen y la experiencia fue estupenda, los camareros muy amables y profesionales, el trato en general exquisito, la comida impresionante, pedimos un arroz con bogavante y aparte de riquísimo la cantidad era muy generosa, desde luego que todo fue perfecto y mi nota es un 10 sin lugar a dudas, este fin de semana han ido unos amigos y han quedado igual de encantados, al final la cena de navidad de mi familia la haremos allí.

No conocíamos ningún restaurante en manzanares del real, con lo cual nos decidimos a comer en éste restaurante junto al río. He de decir que estuvimos en el mes de mayo, y su terraza estaba preciosa, adornada con muchas flores. En cuanto al tema culinario, nos encontramos una agradable sorpresa, y la pena de no poder probar de todo un poquito, porque lo que probamos estaba genial. Para empezar, el camarero que nos atendió era súper simpático y profesional, deleitándonos de entrada y como aperitivo de la casa con unas entrañas de cordero que estaban para quitar "el hipo". Ya por nuestras cuenta, pedimos para compartir unas "fabes con almejas", que estaban para morir. De segundo tomamos cabrito asado, todo un manjar, y finalmente un postre de la tierra denominado "puches", es como na natilla pero con sabor a anís (a rosco de navidad). Todo fantástico!!. Desde luego, he de decir que la próxima vez que vaya a Madrid, me daré una escapadita al asador de carmen, tan solo para poder deleitar mi paladar.

En domingo no hay menú de la casa. La atención es correcta. Almorzamos mi mujer y yo un arroz caldoso con rape, langostinos, etc (20€/persona), ensalada mixta (11,80€), servicio de pan (1,80€/persona) y las bebidas. Un total de 70€. El arroz lo preparan caldoso en fuente de barro y es abundante. La terraza es cómoda. Nota: 6. 5

Lamentable. Restaurante muy caro y con calidad bastante baja para el precio que maneja. Sin vino ni postre salimos a más de 35 por cabeza, primeros, ensalada muy normal, revuelto bastante malo y croquetas. Segundos cuarto de cordero bastante seco, aunque pedí cabrito para dos solomillo insípido y fabes. 4 cañas y una cocacola. Con pan, 142€. Lo del pan es la leche, te lo cobran a 1,80 la rebanada y no te ponen ni plato de pan. Los manteles como en "cuentame" de muy baja calidad. En definitiva precios de restaurante bueno a calidad de tasca. Si no cierran debe ser porque funcionan como las gasolineras, que hay mucho paso de gente y aunque casi nadie repita siempre va uno nuevo. No volveremos

Muy mala calidad de la carne... Incomible.. Parecía chile. Pedimos solomillo y lo dejamos entero. No volvemos mas

Entramos en el restaurante porque nos dio "buena pinta" y fue una decepción. La comida (judiones y chuletillas de lechal) insípida y regularmente cocinada. El postre (una tarta de manzana "casera") totalmente incomible, sabía a ceniza de madera. El servicio ni siquiera se molestó en preguntar si había algún problema cuando vieron que había dejado la tarta entera. Desde luego no volveremos.

No vuelvo más. Había ido 3-4 veces y la verdad es que la comida estuvo bien por eso volví, pero recientemente he estado con unos amigos y no vuelvo más. La morcilla olía mal, bueno más que mal, aliñada para tapar el mal olor, los chipirones encebollados mal aspecto y sabor. El cochinillo sabía a gorrinazo pasado y bueno, el servicio fatal. Tardamos 2,5 horas en comer. Nos aburríamos entre plato y plato. Por no ver el espectáculo del mal trato de los dueños hacia los camareros, con ver eso, entiendo lo demás... Lo dicho, hoy por hoy no es recomendable.

Fantástico! Estupendo! Ayer decidimos ir a pasar el día a Manz. El real. Un compañero me recomendó este restaurante y tras leer los 4 malos comentarios que había sobre este restaurante nos entraron las dudas, pero los argumentos eran bastante flojos, algunos absurdos y preferimos basarnos la opinión de un conocido. Fuimos 9 personas y todos salimos encantados! Teníamos reserva para las 15h pero llamamos para retrasarlo para las 15:30h sin ningún problema. Cuando llegamos teníamos la mesa preparada en la terraza, que estaba prácticamente llena. Pese a ser enero, la temperatura era estupenda, con lo cual la terraza junto al río (muy grande y agradable) estaba abierta (sorprende leer que alguna gente tuvo problemas para ir a la terraza en mayo y que en enero si la abran... ). Debido a que eran cerca de las 15:45, preferimos ir adentro (con decoración rústica muy acogedora), donde también teníamos la mesa redonda reservada y no pusieron ningún inconveniente. La atención de los 3 camareros distintos que nos atendieron fue exquisita. Muy amables y serviciales. El hígado con garbanzos que pusieron como tapa, muy bueno. Entrantes, judiones con matanza, morcilla y ensaladas. Todo buenísimo. Como segundos, muy variado, cabrito, arroz con bogavantes, lomo buey, merluza.... Todo en cazuela de barro y caliente (como tiene que ser un plato). Carta con 25 vinos, ¿es eso escaso? Salimos más tarde de las 18h encantados. Precio 39€, muy merecidos. No dudéis en ir, no os arrepentiréis

Fecha: 21 de marzo de 2008.
Alrededor de las 13,30 llamamos para hacer una reserva de 9 personas. Nos dicen que entre las 3,30 y 4 de la tarde. Cuando llegamos, pedimos unas cervezas que recogimos en la barra (ya que en la terraza no había servicio) y abonamos en el momento de retirarlas. Pasadas las 4 nos dicen que ya podemos pasar. Nos ponen en una mesa en el centro del comedor de 6 servicios nos ponen a 9 adultos. En dicha mesa solo había 6 platos, mal colocados; no había copas; no había cubiertos....
A las 16,30 nadie se había acercado a nuestra mesa ni a ofrecer nada ni a terminar de colocar el servicio.
Nos levantamos y al salir comentamos a una supuesta "encargada" que nos ibamos, que no estábamos conformes con nada de lo que nos estaba sucediendo. Respuesta de ella: una simple elevación de hombros.
No volveremos y haremos correr la voz, no solo por Madrid, sino que llegará a Salamanca, Ceuta, Lugo, Palencia y Oviedo.

Cuando uno va un restaurant en el que el precio medio del cubierto oscila entre los 35 a 45 euros, lo mínimo exigible es que si los comensales son 9, la mesa no sea como para 6, que dicha mesa se encuentre puesta a la hora de sentarse, que si la hora prevista para comer tras hacer una reserva telefónica es de 15:30 a 16:00 se cumpla y no lleguen más de las cuatro y media de la tarde, y como digo, ni siquiera esté la mesa puesta. Supongo que estos señores ya tenían el día hecho y 9 clientes más o menos no son ningún descalabro. Pero la categoría se demuestra de otra manera, y por lo que a mi respecta, este lugar no la tiene. Nos fuimos sin comer, y si probar la supuestamente exquisita salsa con que acompañan algunas carnes y que suponen un suplemento de casi 500 de las antiguas pesetas.