Cuento mi experiencia, fuimos dos matrimonios, y pedimos de entrada pulpo a la plancha y luego dos de chopa a la espalda y dos de pixín a la plancha con verduras, decir que la oferta de pescado era chopa, pixín, merluza, lubina y bacalao, no había nada más, no había lenguado, rey, besugo, rodaballo, salmonete, mero, no recuerdo bien pero en plena temporada creo que no había ni bonito. En fin prosigo, el pulpo estaba bueno, el tamaño de las chopas no llegaba en el argot de los pesquines a "palmeras" tamaño ridículo en un restaurante de esta categoría, eso sí estaban frescas y bien preparadas, que tampoco es muy difícil. La ración de pixín eran tres trozos que como ración no estaba mal, pero la calidad del pixín pobre pobre, estaba muy salado y a la vez insípido, si si, salado e insípido, solo sabía a sal, y mira que el pixín puede llegar a estar bueno........ Nos ofrecieron cambiar el pixín por otra cosa después de protestar pero dada la oferta y el cabreo a mí se me pasó el hambre. La factura no se a cuánto ascendió porque no pagué yo, pero el precio de las raciones era pixín 27 € y las palmeras 23 €, con estos precios no se puede fallar. Por supuesto yo no vuelvo más y supongo que si siguen así tal y como están las cosas no les podrá ir muy bien.