Es la segunda vez que he ido y desde luego que si la relación calidad - precio sigue siendo tan buena nos convertiremos en asiduos. Entre otros ofrecen un menú de 12 en el que incluye el vino, agua y café. Los platos se salen de lo corriente y el trato es exquisito. Es una pena que no abran sábado y domingo, porque podría llevar a mi familia. Muy recomendable!