opiniones sobre el Restaurante La Casona de Butarque

El sitio es malo con diferencia, si te gustan los restaurantes ochenteros donde la comida es pésima y te cobran como si estuvieras en un restaurante cargado de tenedores este es tu sitio, todo es malo y caro, no volveré a que me estafen allí. Nada recomendable.

Ayer día 13 de julio fuimos a comer porque teníamos una reserva on-line en la cual te dicen que tienes un 40% de descuento a la carta. Nada más llegar nos hicieron esperar en la puerta 10 minutos sin nadie que nos atendiera. El cochinillo que pedimos estaba duro y recalentado, el servicio pésimo y lento. Entramos a las 14:45 y eran las 17:00 y todavía no habíamos terminado ya que entre plato y plato tardaban más de media hora. Cuando llegó la hora de la cuenta nos dicen que no nos hacen el 40% de descuento porque esa oferta no existe el fin de semana. Cuando le enseñamos su página web nos dice que no saben lo que tienen puesto en ella y por último que este fin de semana no se hace el descuento. Pedimos la hoja de reclamación y nos la negaron varias veces. Tuvimos que llamar a la policía local para que nos dieran la hoja de reclamación. En fin pésimo, pésimo, el servicio y la atención al cliente. No volveré, aunque habíamos ido durante 20 años seguidos hasta hacía 7 años, pero no tiene nada que ver. Una pena!!

Hoy comí allí y el servicio desde la entrada pésimo con la comida más después de estar dos horas para un menú preparado

Estuvimos el pasado sábado y la verdad que nos sorprendió. Habíamos estado otras veces y no salimos muy contentos pero mis suegros querían ir y allí acabamos. Nos comentaron que había estado cerrado cuatro meses por cambio de dueños así que decidimos darles una oportunidad, y no nos defraudaron. Los camareros simpatiquísimos y muy atentos. Pedimos como entrantes huevos rotos con boletus y langostinos que estaban deliciosos y carne a la piedra de muy buena calidad (no como la que tenían antes). Lo mejor de todo es que tienen un parque infantil cerrado donde los niños pueden jugar y dejarte comer tranquilo. En conclusión, volveremos seguro.

Hemos estado comiendo hoy día de reyes y nunca he estado en un restaurante en el que te traten tan mal, el servicio pésimo, te tratan casi como si les debieras algo, tanto el metre la encargada o lo que sea y el camarero. Luego la comida fatal y eso que no es nada barato, el rabo de toro requemado y duro, y el cochinillo no había quien lo partiese, es resumen un desastre. A mi me han servido en principio costillas de cordero (que no es lechal a pesar del precio) confundidos con cochinillo que era lo que había pedido y al darse cuenta el camarero me ha llegado a decir que ah se siente ahora te lo tienes que comer, menos mal que lo había pedido otra persona de la mesa si no en teoria ya no me lo cambían ¡¡¡¡siendo un error de ellos que me habían dicho que era cochinillo!!!! Por no mencionar que el camarero le ha pegado un meneo a la trona donde estaba mi sobrina de año y medio que se ha pegado un buen golpe contra la mesa. Ahhh y la sorpresa revisar la cuenta porque nos habían colado dos cocacolas que no nos habían puesto además del rabo de toro que lo hemos devuelto porque no había quien se lo comiese. Nada recomendable.

Estuve el sábado día 12 en una comunión y fue un desatre el servicio, comida recalentada y el cordero seco, seco frio un desastre y para colmo se fue la luz no veas que calor sin aire y este restaurante que atiende tantas personas sin una alternativa generador etc etc todos a oscuras peor no pudo haber salido.

Muy mal, servicio de la bebida muy lento el plato estrella la carne se sirvio fria y para el colmo de los despropositos se fue la luz por lo visto fallo de iberdrola pero un restaurante tiene que tener un plan b para estas situaciones, sofocante de calor fatal fatal esto fue el 12 de mayo del 2012 consideratelo bien antes de contratar aqui.

Nosotros estuvimos cenando el sábado y nos gusto mucho tanto el trato como la comida. No nos pareció nada caro. Os animo a que paséis por allí.

Es un restaurante que se come muy bien a parte se comen unos excelentes asados como es el cochinillo y el cordero o cabrito también se hacen unos pescados a la brasa estupendamente

El pasado fin de semana fui allí invitada a una comunión. La comida era de una calidad no demasiado buena, y el servicio pésimo: si les pedías algo te ponían mala cara y hasta te contestaban de mala manera. Parecía que estaban deseando que te largaras o que les costaba el dinero a ellos cada vez que les pedías una botella de agua. La calidad del pescado era regular, pero la de la carne era malísima. Si alguien tiene pensado celebrar allí alguna comida o reunión, espero que esto os sirva de algo. Pero lo mejor sería que os pasarais primero por allí para sacar vuestras propias conclusiones.

El sábado por la noche nos fuimos a cenar nueve compañeros, aprovechando unas jornadas gastronómicas sobre el bacalao (uno de mis platos preferidos de pescado). El maitre, si se le puede llamar así, nos sugirió a los que pedimos éste pescado un plato en concreto ya que él lo había probado y estaba exquisito. Cuatro de nosotros le hicimos caso y el resultado fue que nos sirvieron un pescado seco, saladísimo y “poco” fresco. Parecían lo que les había sobrado de la comida. A esta gran decepción, a la que se unen los demás platos del resto de comensales (no solo en el balacao son unos chapuzas) se une el trato personal. A un maitre que se permite demasiadas confianzas se une un camarero “empanao” a quién le tuve que repetir hasta tres veces que bajaran el aire acondicionado. Conseguí no tener el chorro de aire frío en la espada 15 minutos, terminé poniéndome la chaqueta para comerme el postre. Bueno y ¡qué postre! Me río de los postres caseros de la casona. En definitiva, una gran decepción, porque eso sí, los precios, no están ni de lejos acordes con la calidad ofrecida. A quienes os guste un trato respetuoso y una cocina esmerada y con un mínimo de calidad, no elijáis este restaurante.

Hacía tiempo que quería ir porque una amiga me lo recomendó ¡y en que hora fuí!. El servicio malo, poco profesional hasta el punto de retirar un plato entero y ni siquiera preguntarte si te ha gustado o nó, aunque por otro lado es evidente pues nadie mejor que ellos saben la mala cocina que tienen, mal elaborada. Lo de los postres "caseros" no se lo creen ni ellos. Respecto al local una decoración que carece de buen gusto, no encontré por ningún lado los "detalles majestuosos" ni su "definido estilo rústico". Y con respecto al precio ¡no se como no les da vergüenza cobrar esas cantidades ofreciendo una comida tan mediocre!.

Si aún así cometéis el error de ir os digo lo que yo pedi: setas rellenas de bogavante, que perfectamente podía ser cualquier otro "bicho", las setas por cierto estaban tan duras que casi no se podían cortar con cuchillo. Merluza con boletus, regular.

Manitas de cerdo rellenas de morcilla, espantosas. Y un postre de chocolate que de "casero" tenía muy poquito.

Dicen que las buenas costumbres no se deben perder, y yo ese día tenía que haber ido donde voy por costumbre "EL CEBADERO" que está muy cerquita de este sitio y a años luz en calidad, profesionalidad, etc.

La 1ª vez que fuí (me llevaron) me sorprendió su ubicación (polígono industrial en Leganés). Ahora después de 5 años yendo al menos 1 vez al mes, puedo decir que es el mejor sitio donde como mi plato preferido -chuletón a la piedra- pero sus gambas a la plancha, los espárragos trigueros, o sus platos de jamón ibérico hacen que mis glándulas salivares empiecen a segregar justo en el momento que estoy aparcando el automóvil. El pescado lo preparan de maravilla y las carnes de caza saben distintas en éste sitio. Tienen una bodega muy completa, aunque no salgo del Mauro o del Verónica, cualquier caldo que recomienden lo pueden aceptar. El sorbete de limón al cava es mejor que el que hace mi mujer y ella lo sabe. La atención del metre es muy amable y los camareros muy atentos, es un sitio com amplios salones y encima se puede fumar.

Cuando quiero agradar o quedar bien con alguien es el sitio ideal, pensando o desde el punto de vista del buen comer, aquí el diseño y el glamour no tienen razón de ser. Buen provecho........

Recomiendo a todo el mundo que tenga pensado ir a la Casona de Butarque, que lo evite en la medida de lo posible, ya que no habia estado en ningun sitio tan malo en toda mi vida.El servicio, es deplorable, ya que por poneros un ejemplo te tiran la comida a la mesa, no la sirven. La comida, es penosa, aunque el precio de la misma es como si estuvieras comiendo productos de primerisima calidad.El resumen de la cena se reduce a una palabra: Deplorable. Eso si, el precio del cubierto nos salio casi a 50 €.No vayais ni de coña, hacedme caso.